¿Te aburre tu salón? Quizá necesita urgentemente un cambio de aires. Y no solo porque lo tengas muy visto, sino porque se ha quedado algo demodé o porque, simplemente, quieres darle un toque estacional. Te mostramos y demostramos que, sobre una base neutra, solo se necesitan nuevos textiles, complementos y algunas flores para un cambio de look radical.
Fíjate bien: ni el sofá ni la mesa de centro cambian. Y tampoco las cortinas. Estos elementos siempre son los mismos, y el espacio también. Lo único que varía son los accesorios, aunque en cada estilismo parezca un salón completamente diferente. De estos tres estilos... ¿con cuál te quedas?
Look 1: Primavera vintage
Imposible no querer todo lo que hay en este salón. Su personalidad: fresca y muy natural. Los cojines son siempre el mejor punto de partida para "darle una vuelta" al salón. En este, nuestra estilista Monica Klamburg ha mezclado varios cojines con motivos florales que combinan bien entre sí porque comparten su base blanca.
La nota de color que "levanta" el conjunto y suma calidez la pone el plaid de mohair, en verde pistacho. Los portavelas y farolillos de cristal dejan pasar la luz y la "reparten" por todo el salón. Quedan muy bien con objetos metálicos vintage y con acabado bronce: tiñen la claridad con su brillo y la multiplican todavía más. Y las plantas, ¡no pueden faltar! Su color es la fuente de inspiración de este salón, en el que las crasas y las hiedras se reparten el protagonismo.
Las 3 claves del look
- Cojines con estampados florales
- Mezcla de materiales como cristal y metal
- Plantas repartidas por varios puntos del salón
Look 2: Busca lo más vital
Con un aire silvestre y colores intensos, el ramo de flores llena de vida el salón. Si te gusta la idea, puedes mezclar flores distintas (aquí jacinto, anémona y protea), en tonos que coordinen como blanco, fucsia, morado... Y añadir verde para darle cuerpo.

De flor en flor
El ramo ideal paso a paso
Los colores fucsia, turquesa y mostaza de los cojines consiguen la combinación perfecta para llenar de alegría el salón. Para que encajen, los estampados mezclan blanco y fucsia, y los lisos mostaza son para relajar el conjunto. Contrarresta la "fuerza" de flores y cojines con otros complementos de tonos muy claros, como la lámpara y los jarrones de loza en verde mint.
Las 3 claves del look
- Ramos de flores muy vitalistas.
- Cojines tutti colori.
- Detalles en tonos claros que atenúan y suavizan el conjunto.
Look 3: El clásico que nunca falla
En decoración hablar de clásicos no es hablar de piezas y estilos obsoletos. Más bien todo lo contrario. Son aquellos que, por mucho que pasen los años, siguen siendo una apuesta segura. El estilismo de este look atemporal empieza por colocar un ramo bicolor sobre la mesa: en blanco y verde.
En el de la foto las flores son hortensias y peonías, suficientes para llenar el salón con su elegancia. Unas hojas de eucalipto le dan más presencia y hacen que los pétalos blancos se vean aún más blancos. Dado su volumen, lo mejor es elegir un jarrón bajo de boca ancha. Si fuera más alto, el ramo sería demasiado grande.
El blanco y el gris, junto con algún toque tostado, son el trío ganador. ¡Nunca pasa de moda! Así que alíate con él si quieres que tu salón sea atemporal. Si quieres crear dinamismo sin perder esta elegancia, escoge telas con diferentes texturas. Para terminar, coloca un par o tres de piezas únicas, como el candelabro de lágrimas. De hierro y en color blanco, es decorativo pero ligero, como una escultura.
Las 3 claves del look
- Arreglo floral bicolor.
- Escala de grises en cojines y accesorios textiles.
- Piezas que dan personalidad, como el candelabro.