Contrariamente a la opinión general, decorar en tonos rojos es una opción muy versátil tanto cuando se utiliza para enfatizar como cuando forma parte de una paleta complementaria, además de ser una impactante declaración de intenciones. Los decoradores saben que la fuerte personalidad del color rojo aporta sorpresa, calidez y, sobre todo, mucha vida a los espacios. Sólo hay que ver el interiorismo ideado por Lorenzo Castillo (en la foto) en las zonas comunes del renovado hotel AC Santo Mauro de Madrid.
Usado de forma cuidadosa, el efecto glamuroso y dramático del rojo hace que los espacios sean audaces y que las personas se sientan especiales, por algo destaca sobre el resto de colores.
El color del 2018
En las apuestas sobre cuál será el color del próximo año, el rojo parece ir en cabeza: Pantone ha incluido el Granedine en su reciente selección otoñal y Benjamin Moore, una de las marca de pinturas más conocidas de EE.UU., ha escogido el rojo Caliente AF-290 como el color del año 2018.
"Es el color distintivo de una obra maestra de arquitectura moderna, una alfombra exuberante desplegada para una gran aparición, el fiable telón de fondo de una biblioteca llena de libros, una poderosa primera impresión en una brillante puerta frontal”, así ha descrito Ellen O’Neill, su directora creativa, el color Caliente.
Simple y sofisticado, ya sea el escarlata o uno menos vibrante y envejecido, el rojo no puede faltar en tu casa. ¡Ah! Y si, además de adelantarte al resto, quieres no fallar, ya estás apuntando este tono: bayas de acebo.