¿Sabes cuál es el perfecto deco-fondo de armario?

La respuesta te dará las piezas en las que debes invertir más. Suelen ser: cama, mesa, sillas de comedor y sofá. Así, en este orden. Porque la cama la usas a diario pero el sofá... a veces, ni lo catas, ¿o no? Diseño de Grup Escrivá Interiors. 

Tienes cinco vajillas y solo usas tres. ¿Por qué tener una pieza más grande de lo que puedes permitirte para guardarlas todas? Regala dos. En tu fondo las piezas no deben acomodarse a las cosas sino lo contrario. 

¿Un ejemplo? Las Mid-Century porque su diseño es único, aportan personalidad a los espacios, quedan bien con todos lo estilos, no pasan de moda y se revalorizan con el tiempo. Hablamos de las sillas Eames, de las Whisbone, de la lámpara Coderch, etc. Sillas Wishbone, en India&Pacific. Deco de Marta Prats.

Es decir, que sean versátiles y puedas usarlas en varias estancias o para distintos usos. Si tienen ruedas, más cómodas serán para llevarlas de aquí a allá. Salón de la arquitecta Eli García Crus, autora del blog Lost in Vogue. Todo, en Kenay Home. 

Si puede ser de suelo a techo y de pared a pared, mejor. Porque siempre hay cosas que guardar en casa. Y no solo tus outfits. ¿Y la ropa de casa? ¿Y las maletas? ¿Y...? Si los frentes son discretos, lisos y sin tiradores, el gran armario será útil y casi invisible. Decoración de Pía Capdevila. 

En tu cabeza. Vamos, piezas que, por tiempo y modas que pasen, siguen gustándote igual o más. Lánzate. Lo que no es un mero capricho sino un deseo largamente meditado, merece formar parte de tu fondo de armario.

Los muebles de colores o superficies llamativas difícilmente sobrevivirán al paso del tiempo. En cambio, cuanto más serenos sean, más encajarán con todo y más números tendrán de convertirse en el fondo deco perfecto para tu casa. Espacio de Pía Capdevila.

Las modas pasan rápido por lo que lo más inteligente, sino quieres arruinarte, es dejar los diseños de temporada para los complementos, que son más económicos, y conseguirán dar un look a la última a los muebles "de siempre".

No pienses en tus piezas para que alberguen a ciento y la madre. En tu casa vives tú y tu familia, y el fondo de armario debe adecuarse únicamente a vosotros. Para los demás, podrás tener sillas extras o pufs en los que invertir mucho menos.