Rejilla y diseño parecen dos palabras destinadas a no entenderse. Pero en cuestión de modas (casi) todo vale. Y lo que hace unos meses era viejuno y anticuado, ahora puede estar de rabiosa actualidad. Esto exactamente es lo que ha ocurrido con el clásico mimbre esterillado, conocido por todos como rejilla.
Su esencia artesanal encaja a la perfección con las tendencias decorativas actuales , donde lo tradicional, el diseño sostenible y eco y la filosofía slow o slow deco se dan la mano para crear atmósferas más naturales e incluso más zen. Sin olvidar el interesante juego de luces y sombras que el mimbre esterillado crea, no solo en estas piezas, sino también en el espacio.
Pero la rejilla no es solo cosa de sillas, como el icónico asiento de la silla Thonet, o de cabeceros afrancesados . Mesas, lámparas e incluso sofás y aparadores (como el de la imagen que pertenece a la colección Fleur de sel de Bloomingville) se han contagiado por este tejido de fibras naturales dando lugar a piezas muy singulares, a caballo entre la tradición y la vanguardia, de aspecto cálido y muy liviano.