¿Quieres tener una piscina pero te preocupa el medio ambiente? Las piscinas convencionales, también llamadas artificiales, consumen bastante cantidad de agua y usan productos químicos para su mantenimiento, como el cloro, la sal (la sal depura a través del cloro que contiene) y otros desinfectantes, que, además, son perjudiciales para el cuerpo. “Tampoco se utilizan sistemas ópticos que desinfectan al matar a todos los organismos de agua, sean beneficiosos o nocivos”, añade Íñigo Elorduy especialista de BioNova.
“El agua es completamente cristalina, como si estuvieras bañándote en un río o lago, ya que al fin y al cabo se construye un ecosistema en equilibrio” BioNova
Las llamadas piscinas naturales, biopiscinas, naturalizadas o ecológicas no utilizan productos químicos sino que su principal diferencia es el proceso de depuración. Recurren a la recirculación, oxigenación y depuración biológica del agua a través de las plantas que rodean la piscina y que están dentro de ella. Estas ayudan a oxigenar y eliminar los nutrientes que podrían hacer que se propagasen las algas y otros microorganismos indeseables.
Para que el proceso de depuración del agua se produzca, en una piscina natural se crean dos zonas separadas. Por un lado la de baño y por otra la de depuración como tal, un espacio con sustratos de filtración como grava, arena o piedra volcánica y plantas. El agua es 'recirculada' de una zona a otra por medio de una bomba hidráulica, de forma que los nutrientes producidos en la zona del baño llegan a las plantas purificadoras, que los eliminan.
Cuidados de la piscina natural
El mantenimiento que requiere una piscina natural es muy similar al de una piscina convencional. Es necesario retirar las hojas u otros elementos que queden en la superficie y/o limpiar las cestas de los skimmers (piezas donde se acumula la sucieddad). También es necesario el uso de un robot automático limpiafondos específico para piscinas naturales, que retirará el exceso de sedimentos.
“La principal diferencia en el mantenimiento de una piscina natural está en el cuidado del jardín acuático que supone la zona de regeneración. Al igual que en el cuidado de un jardín, debemos podar y limpiar las plantas en algunas épocas del año, así como abonarlas una vez por temporada con un fertilizante especial”, recuerda Íñigo.
Toni Barrio, de Piscinas Ecológicas explica que “los lagos de baño y piscinas de aspecto más natural tienen como mantenimiento solamente la limpieza de los equipos externos e, incluso, se puede automatizar. También una vez al año hay que podar las plantas acuáticas que se han puesto marrones en invierno para que broten con fuerza en primavera. Con respecto a las piscinas con aspecto más tradicional y con vaso diferenciado para la zona de baño, también hay que limpiar la zona de baño, en eso no difieren de las convencionales”.
Nunca hay que cubrir las piscinas, al menos la zona en la que se encuentran las plantas, ya que son seres vivos. En invierno, la vida del jardín se aletarga, pero no se para. Durante esta estación, “las piscinas naturales reducen su gasto energético en un 60%, siendo el consumo inapreciable pero al mismo tiempo necesario para que vaya recogiendo la materia orgánica que se deposita en superficie”, añade Toni.
Las plantas de la piscina natural
Las plantas que se deben poner en una piscina natural son de varios tipos y se colocan a diferente profundidad. Cada una de ellas tiene una función asociada.
- Palustres, de 0 a -25cm de profundidad
- Sumergidas emergentes -20 a -60cm
- Oxigenantes o de profundidad, -40 a -250cm
¿Cómo se construye?
Todos los materiales que se usan en la construcción de una biopiscina son naturales. Según la empresa encargada, pueden existir diferentes sistemas constructivos, en función del estilo elegido. Toni Barrio detalla que “en nuestra versión más natural, la cual es similar a un lago natural, no utilizamos obra, realizamos una excavación de morfología natural, impermeabilizamos con lámina y decoramos con áridos decorativos naturales (rocas, gravas, arenas…), terminando con un paisajismo que acompañe a este tipo de proyecto, dando la sensación que este lago siempre ha estado allí".
Pero también es posible realizar una piscina natural de un estilo tradicional o minimalista, más alejados de la estética de lago y similares a una piscina convencional pero con sistema biológico. En estos casos las piscinas se construyen en un bloque armado. En cualquier caso, siempre se necesita un espacio extra para la ubicación de plantas y gravas filtrantes (filtro biológico).
Ventajas de las piscinas naturales
- La experiencia del baño es similar a la que se puede tener en un lago natural, incluso con peces -que también ayudan a depurar-
- Se cuida la salud. Como recuerda Toni Barrio, de Piscinas Ecológicas, “nos estamos bañando en agua dulce, cristalina, pura y desinfectada, libre de productos químicos.
- Se ahorra en productos de depuración (cloro, alguicidas, floculantes, ph+,ph- , estabilizadores, etc.).
- No se usan productos químicos por lo que no se contamina y la piel del cuerpo no sufre alergias ni agresiones
- Se integra de manera natural en un jardín. "Una piscina natural se amortiza todo el año, ya que forma parte del jardín, está integrada en este. Cumple una función ornamental y de estanque cuando, por la temperatura, no es adecuada para uso de baño”, comentan desde Pisicinas Ecológicas
- La forma que adquiere una piscina natural es muy libre y se adapta al terreno
Desventajas de las piscinas naturales
- En una piscina natural hay que calcular las personas que se bañarán porque de ello depende el número de peces y plantas que se incorporan. Si no hay una proporción adecuada, las plantas podrían no depurar suficiente
- Hay que tener cuidado de que los más pequeños no hagan pis en el agua porque plantas y peces depuradores no eliminan la orina
- Una piscina natural ocupa espacio ya que hay que crear las dos zonas necesarias para su funcionamiento. Se necesitan mínimo 25m2 de superficie y 2,2m de profundidad para una correcta depuración
Los especialistas en piscinas naturales a los que hemos consultado nos dan su opinión acerca de por qué optar por la construcción de una piscina de este tipo frente a una convencional:
Íñigo Elorduy: “no solo es beneficiosa para el planeta, ya que a nivel de producto no utiliza químicos, el agua recircula y no hay que vaciarla nunca; es que a nivel constructivo puedes dejar la menor huella posible al instalarse sin necesidad de construcción con hormigón. Es beneficiosa para la salud ya que no te expones a químicos que alteren el equilibrio natural de la piel. Son totalmente reversibles y reciclables”.
Toni Barrio: “es una apuesta por la salud. Me puedo bañar en un agua pura y desinfectada rodeado de un marco natural, una experiencia similar a bañarse en un río de aguas cristalinas entre plantas y peces, pero en nuestra propia casa. Es una construcción que se integra perfectamente en el jardín y se disfruta todo el año, amortizando la inversión realizada. Además, es un gran campo de aprendizaje para los más pequeños que verán cómo funciona un ecosistema y todos los seres vivos que lo componen”.