El poder transformador de la luz es sorprendente. Basta con llevar más claridad a un espacio para que este parezca otro. Y los baños, que muchas veces son interiores y poco luminosos, no son una excepción a esta norma. Porque nos apasiona ayudarte a disfrutar de una casa más confortable, hemos reunido 10 trucos con los que podrás llevar más luz a tu baño. ¡Y sin hacer grandes cambios! Haz la prueba y verás cómo parecerá otro.
1. Refléjala y harás que se multiplique
Cualquier superficie del baño es buena para reflejar la luz. Las paredes, el suelo, el techo... ¡Y también los muebles! Una buena idea es elegir para la encimera del baño un material de acabado reflectante.
Si buscas una opción natural, puedes optar por la piedra pulida. Una alternativa es un cristal securizado brillante, como el de la imagen. Eso sí, intenta mantener la encimera el máximo de despejada para que el efecto sea mucho más evidente.
2. Adiós alicatado, hola pintura
Alicatar hasta el techo no está de moda. Así que aprovecha para hacer un zócalo de baldosas y pintar el resto de la pared. Con ello, darás más altura al baño y, además, te saldrá más económico. A la hora de elegir un color, el blanco es siempre un acierto: además de ser el más luminoso de la paleta cromática, da sensación de limpio, y en el baño nunca está de más. Si prefieres una nota de color, prueba con el gris claro. En ambos casos sumarás sensación de espacio y altas dosis de luz.
3. Paredes con brillo propio
Elige azulejos en tonos claros para ganar claridad. Si son brillantes, como aquí, reflejarán la luz. Otra opción de tendencia es la cerámica de gran formato con relieve, como el modelo Oxo Line Blanco, de Porcelanosa. Sus formas geométricas modifican la percepción del espacio.
4. Pavimento: claro y hasta el infinito
Minimiza el efecto puzzle de las baldosas eligiendo piezas grandes (las hay ya de más de un metro), claras y con junta rectificada para que el suelo se vea el máximo de continuo posible.
100% continuo. Si empleas para las paredes el mismo material que has usado para el suelo, crearás sensación de continuidad visual que ampliará visualmente el espacio del baño.
¡A volar! Con sanitarios y muebles suspendidos, la luz no encontrará obstáculos para circular a sus anchas.
5. Elige una luz para cada función
Luz general. Para iluminar la estancia necesitas unos 100 lux (lúmenes por m2).
Luz puntual. Es básico colocar una luz que ilumine bien el espejo. Opta por una luz blanca fría, lo más parecida posible a la natural (5.000 ºK o superior) para que no altere el color de la piel, muy importante a la hora de maquillarse. Aquí, se aconsejan unos 200 lux (lúmenes por m2).
6. Mamparas que te hacen ganar metros
Una mampara invisible te hace ganar un mínimo de 70 x 70 cm de espacio en tu baño, con lo que lo verás más diáfano. ¿Las claves? Elegir cristal transparente y minimizar los perfiles. Si tienes un ancho de 130 cm, lo tienes perfecto. Podrás instalar una hoja sujeta a suelo y pared con juntas de estanqueidad, sin perfiles ni puerta. Pero si no tienes tanto espacio, puedes optar por puertas correderas sin guías.
7. Accesorios ligerísimos
Hasta lo más pequeño puede dar luz al baño. Sí, hablamos de los complementos: toalleros, colgadores, vasos, jaboneras...
Adiós brillo. Atrás quedó el acero brillante..., ¡y mira que daba luz! ¿Un sustituto? El metal con acabado cromado. Actúa como un espejo para la luz pero sin destellos. Eso sí, elígelo de calidad para evitar que se oxide y acabe dejando cercos anaranjados.
En la encimera. Apuesta también por complementos en cromo, metacrilato o porcelana blanca, que es la más sufrida frente a la cal.
8. Textiles que iluminan
Las toallas blancas son la opción más segura. Pero..., ¿y si te gusta el color? Puedes optar por azulados o grises claros. Combina toallas, alfombras y cortinas en estos tonos y en blanco. El contraste hará que el blanco aún parezca más intenso.
9. La puerta también cuenta
En un baño sin ventana es básico conseguir que le llegue luz, sea como sea. Y la clave está en la puerta de entrada.
Ponla de cristal. Acertarás si es traslúcido: el baño tendrá intimidad pero a la vez claridad. Si es corredera, además ganarás 1,5 m2 útiles.
O personaliza la tuya. Si no quieres cambiar la puerta, píntala o lácala en blanco. Así lograrás un plus de luminosidad.
10. Juega con los espejos
Además de aumentar la luminosidad y la claridad en el baño, los espejos crean sensación de profundidad, por lo que el espacio se percibe mucho más grande. Aprovecha y sácales el máximo partido.
Tamaño XXL. En el tocador, coloca un espejo a medida desde la encimera hasta el techo, ocupando todo el ancho que puedas.
¿Más espejos? No te limites a poner solo uno: las puertas de los armarios también pueden ser de espejo. Y si colocas uno en la pared opuesta al tocador, el efecto será espectacular. Pruébalo.