¿Qué significa danshari? ¿Tiene traducción?
Dan-sha-ri:
- dan = rechazar las cosas innecesarias
- sha = deshacerse de las cosas inútiles que uno posee
- ri = detectar el deseo insano por las cosas innecesarias)
El dansharise podría definir como el arte de tirar, con el fin de tomar las riendas de nuestra propia vida y tomar nuestras propias decisiones en nuestro espacio y, además, nos insta a vivir ahora, en el presente. Vamos, el aclamado 'Aquí y ahora' de disciplinas tan antiguas como actuales como el yoga o el mindfulness, muy relacionadas con este método de orden. Si te gusta el feng shui y eres una seguidora del método Marie Kondo, el danshari es tu próxima estación. Una vuelta de tuerca más para alcanzar el bienestar a través del orden.
¿Cuántas veces ha entrado en tu casa un objeto que no era "muy tú" pero ahí se quedaba por meses y años? Normalmente regalos o cosas de otras personas. "Esto no lo tiro porque es de un ser querido que ya no está", "esto me lo quedo porque me lo regaló mi cuñada y temo herir sus sentimientos si no lo ve por casa cuando venga"... ¿Te suena?
La conclusión es que la mayoría de nosotros no vivimos únicamente rodeados de cosas que queramos tener o que sean el resultado de decisiones nuestras. E inevitablemente, esto condiciona cómo nos sentimos en 'nuestro espacio'.
Vivir tanto en el pasado como proyectados en el futuro también nos hace acumular. Si te anclas en el pasado, guardas cosas que compraste en su día pero que hoy no tiene ningún sentido que estén en nuestras vidas. A veces las guardamos por lo que nos costaron, otras por nostalgia y, la mayoría de las veces, por simple pereza. También acumulamos por lo contrario, con visión de futuro. Vamos, los socorridos "esto lo guardo por si acaso". La ropa de esquí de hace años, que nunca jamás he vuelto a utilizar, pero por si acaso algún día vuelvo a la nieve; el video VHS porque algún día puede valer una fortuna como objeto de otra dimensión; etc. Hay que romper con esto, y el danshari te ayuda a conseguirlo.
Las 5 reglas de oro del Danshari
El Danshari no es un mero método de orden. Es todo un estilo de vida, de estilo de vida minimalista, que se rige por estas claves:
- Nunca llenes algo del todo. Ni tu armario, ni la casa, ni mucho menos tu cabeza. Intenta ocupar máximo el 80% de la capacidad total de un espacio.
- Quédate solo con lo que te haga feliz. Selecciona aquellas cosas que de verdad te aportan y limítate a ellas, reemplazándolas si aparece una nueva que se merezca ese lugar. Con esta regla, aprendes a valorar lo que tienes, porque limitas la cantidad de cosas y todo lo que tienes se vuelve más selecto.
- La regla de los dos movimientos. Vale, ya has elegido... Ahora, ¿dónde lo guardas? Yamashita recomienda hacerlo de tal modo que el acto de guardar y sacar las cosas exija, como máximo, dos movimientos: abrir la puerta del armario y cogerlas.
- Un orden que produzca autonomía y libertad. Guardar los objetos de forma vertical, como en los supermercados, ayuda a seleccionar con libertad lo que necesitamos y a acceder a ello fácilmente. Así que, tener las cosas en orden y a mano produce una agradable sensación de autonomía.
- Ponte en modo 'marcha automática'. Esta regla se basa en la capacidad natural del cuerpo para autorregularse y responder ante los estímulos. Con el 'Dan-sha-ri' se recupera el orden de las cosas, que repercute directamente en nuestra relación con ellas y nuestra actitud para afrontar los problemas.

¿Necesita mi 'yo presente' las posesiones que ahora mismo tengo?
Si la respuesta es no, ¿por qué me cuesta tanto deshacerme de estas cosas que he ido acumulando durante años, y que a fecha de hoy sigo guardando? ¿Qué es lo que me lleva a hacerlo?
Hideko Yamashita nos enseña a deshacernos de todo aquello que no es útil en nuestra vida y que no nos aporta nada esencial: desde la ropa que nos sobra en los armarios a esa relación que vamos arrastrando por costumbre, pero que no nos llena. Danshari es conocerse uno mismo a través del orden. O dicho de otro modo: al poner orden en los trastos de la casa, ponemos orden también en los trastos del corazón.