La deco actual está de revival y le sienta de miedo. Y es que nos gustan los muebles retro, vintage, envejecidos, personales y con historia. Y en ese grupo entran también las piezas de fibras naturales, muebles y complementos que triunfaron entre los 50 y los 60, y que hoy han vuelto con fuerza. Mimbre, sisal, bambú, yute... Elijas el material que elijas y lo pongas donde lo pongas, le darás un plus acogedor, cálido y fresco a la vez, a cualquier rincón de tu casa, desde la terraza al baño.
Primavera, verano, otoño...
Si te decimos "en tres segundos imagina un conjunto de muebles de fibra", ¿qué es lo primero que te viene a la cabeza? ¿unas butacas y una mesita de terraza? Posiblemente. Porque estamos acostumbrados a situar la fibra en el exterior, pero en los últimos tiempos esta se ha ido colando en los interiores y hoy no hay casa que no tenga un detalle de fibra en el salón, la cocina o el dormitorio. Además, ¡es una de las tendencias en decoración esta primavera!
Son naturales, ligeros, resistentes, cálidos en color y frescos en textura, adaptables y ecológicos
Además, las fibras naturales no entienden de estaciones porque son cálidas y frescas a partes iguales. ¿Un ejemplo? Una butaca de ratán en tu salón puede ser el asiento más fresco del mundo con un cojín de lino de color turquesa o puede invitarte a acurrucarte en él si le cuelgas un plaid de mohair de tono ocre, ¿o no?
¿Qué estilo tiene tu casa?
¿Rústico, clásico, nórdico, bohemio...? No hace falta que respondas porque tenga el aire que tenga, las fibras encajarán perfectamente en ella. Tienen ese poder. Así, en estancias rústicas, quedan equilibrados y en espacios minimalistas, aportan un toque de contraste muy exótico. Y aun hay más: puedes reconvertirlas dándoles color con pintura eco y así, o bien destacarlas todavía más, o bien coordinarlas mejor con el resto de muebles.
Fibra a fibra
- Sisal. Resiste como nadie los ambientes marinos, así que, si tienes una casa cerca de la playa, las piezas de sisal aguantarán perfectas más tiempo.
- Mimbre. Es muy flexible y ligero, con lo que se convierte en el material perfecto para piezas de formas curvas e, incluso, de gran volumen.
- Ratán. Es dúctil como el mimbre pero tiene una ventaja sobre este: es más resistente.
- Yute. Muy versátil pero también delicado; debes tener cuidado si se vierten líquidos ácidos sobre él.
- Cáñamo. Elígelo mezclado con algodón o lino para que gane más suavidad. Ideal para alfombras, por ejemplo.
- Fibra de coco. Esponjosa y antibacteriana, funciona perfectamente en alfombras y también como arrimaderos.
- Bambú. Antibacteriano, además, absorbe la humedad y es muy resistente.
Con valor añadido
Lo artesanal triunfa. Valoramos las piezas originales, realizadas como se hacían en el pasado porque implican paciencia y mimo, y nos aseguran que no encontraremos exactamente la misma en tres millones de hogares a nuestro alrededor. Además, se han recuperado no solo para muebles y complementos sino también en el desarrollo de nuevos materiales porque son aislantes, fuertes y biodegradables.

COLORES Y TEXTURAS
Una casa más relajante y natural
Filosofía natural
Elegir piezas de fibras naturales, además, es elegir un estilo de vida respetuoso con el medio ambiente porque provienen de especies vegetales que se encuentran de forma abundante en la Naturaleza y que además tienen un crecimiento muy rápido. Por otro lado, para mantenerlos siempre perfectos, no necesitarás aplicarles productos químicos. Lo lograrás así:
- Limpieza habitual: con un paño mojado en una solución de sal gorda y agua caliente –dos cucharadas de sal por cada litro de agua–.
- Limpieza profunda: con una vaporeta.
- Manchas difíciles: frótalas con un cepillo mojado en agua con detergente y amoníaco.
- Recupéralos: con una mano de pintura en spray para llegar a todos los recovecos. Así, una pieza antigua parecerá como nueva.
Y ahora, entra en nuestra galería de imágenes. Hemos hecho una selección de ideas que te ayudarán a elegir las piezas perfectas para tu casa.