El verano es, por sí solo, un motivo más que suficiente para celebrar. Y, el jardín, el escenario perfecto. ¿Más excusas para montar una fiesta? Las que quieras: una reunión familiar, el reencuentro con amigos, la luna llena, el estreno de las ansiadas vacaciones, una velada romántica… Si te lo propones, cada día puede ser una fiesta.
Y, como es habitual, todas las celebraciones tienen lugar alrededor de la mesa. Así que, ya que estamos en el jardín, ¡llenémosla de flores! Pequeñas macetas, centros de mesa, jardineras rodeándola e incluso glicinas o enredaderas que se convierten en una cubierta natural. Accesorios, vajillas, mantelería… En esta galería encontrarás muchísima inspiración para crear el escenario perfecto para tus fiestas en el jardín.
Muebles: los anfitriones
La madera es uno de los materiales favoritos para los comedores de exterior. Al ser natural, encaja perfectamente en el jardín. Las maderas más exóticas resisten bien el sol y la lluvia. Además, si no las tratas, el paso del tiempo deja un encantador efecto vintage sobre su piel. Puedes rodear la mesa de robustas sillas o bien de modelos plegables. Bastará un cojín de asiento para sumar comodidad. Así sí que las sobremesas serán eternas.
Color: el alma de la fiesta
Los colores tienen la virtud de animar cualquier rincón. Basta con unos toques para que el comedor del jardín se transforme de inmediato en el escenario perfecto para una fiesta: en los cojines de asiento, el mantel, los jarrones o incluso en la vajilla. Los tonos azules y verdosos harán que el jardín resulte todavía más fresco; los rosas y violetas, más romántico; y, al vital color amarillo, siempre que vaya acompañado de beige y blanco, no le faltará elegancia. En cuanto estampados, los grandes favoritos son los florales, en rosa, rojo o tonos violeta, y los veraniegos vichy en verde, rosa, rojo o azul.
Flores: las invitadas VIP
No pueden faltar. Son capaces de transformar un espacio agradable en un rincón lleno de encanto. Reparte flores y más flores por varios puntos del jardín: sobre la mesa, en una mesita auxiliar, en el alféizar de una ventana próxima, en tiestos rodeando el comedor, en un parterre… Además de añadir color suman frescura, romanticismo y un precioso toque natural. Para tus invitados serán una clara señal de que has pensado en cada detalle.
Sombra: ella sí que no puede faltar
Sí, en verano los espacios de exterior se vuelven los grandes favoritos. Pero para disfrutarlos al máximo se hace imprescindible tener algo de sombra. Si tienes un porche observa cuál es la dirección del sol y si se cuela hacia el interior en algún momento del día. De esta manera podrás determinar cuál es el rincón que goza de más sombra: será el perfecto para colocar la mesa. En el jardín, un gran árbol con abundantes ramas y hojas puede convertirse en un techo de lo más natural, aunque una pérgola te asegurará mayor protección, ya sea con techo de madera, de cañizo o con enredaderas (muy bucólico).
Los jardines de esta galería tienen ganas de marcha. Entra, inspírate y coge ideas para crear el escenario ideal para tus celebraciones y también para el día a día disfrutando al fresco con estilo. ¿Nos invitas?