No hay que ser Donald Trump para cambiar de casa a cada cambio de estación. Solo hay que tener buenas ideas y pasión por la decoración. Y a ti no te falta nada de todo esto. Ahora que se acerca la primavera, nos entran unas ganas irrefrenables de empezar a preparar la casa para abrirla a la luz y el color. Te dejamos algunas ideas que te ayudarán y, como no tenemos freno, algunas más para cuando llegue el verano, el otoño y de nuevo el invierno. ¡A por ellas!
Primaveriza tu casa
Boom de flores y de color
¿La forma más sencilla? Pequeños jarrones aquí y allí con flores silvestres. Que den color y perfumen cada estancia de tu casa. Y llévalas también a los textiles.
Elige estampados de flores y lisos con colores vivos. Sobre un sofá blanco destacarán y bañarán el salón de un aire muy happy y desenfadado.
Adiós lanas, hola linos
Y algodones. En las cortinas, en las fundas de butacas o de sofás, en las colchas... De tonos claros y naturales, crearán una base perfecta para que destaquen los detalles con más color, y darán un toque más fresco.
Terraza a punto
Empezarás a disfrutarla desde ya. Si tienes un mínimo espacio, hazte con un rincón para sentarte al sol. Piezas de fibra con cojines estampados a flores serán perfectas.
Jardines interiores
Si no tienes terraza, crea un jardín interior en el que disfrutar igual que lo harías en un patio con plantas de varias alturas para darle movimiento y profundidad.
Tú pintas mucho
No hace falta que pintes la casa, pero sí puedes dar toques de color a piezas pequeñas.
¿Por ejemplo? Marcos de cuadros, miniestanterías o piezas recuperadas, incluso a patas de sillas o de taburetes. Hazlo con chalk paint. Su acabado es muy natural y fresco.
Ve de pulgas
O sea, a mercadillos. O bien rebusca en casa. Fijo que das con piezas encantadoras para convertirlas en pequeños jarrones –lecheritas, vasos tallados, tinteros...– en los que colocar una flor o en macetas especiales –soperas, tazas, coladores...– para llevar plantas incluso al baño.
Verano: dale vacaciones
¿No puedes irte al Caribe?
Pues si Mahoma no va a la montaña... ¡llévate el Caribe a casa! Sol y palmeras. ¿Cómo? ¿Qué te parece así? Papeles o cuadros con dibujos de hojas verdes; "amarillo sol" en cojines y ropa de cama; madera; fibras... ¡Vivo y luminoso!
Vuelve Verano Azul
Como cada año. Pero no hablamos de la serie de Chanquete, sino del estilo marinero. Del uso del blanco y el azul que nos hacen pensar en ambientes de playa. Ponlos en cortinas, en cojines, en mantelerías o vajillas... Puntos de frescor que se agradecen cuando el calor aprieta.
¡Échale sal!
En forma de estrellas, conchas, pequeños troncos como los que van a la deriva en el mar...
Decora con ellos la mesita de centro, tu mesilla de noche, repisas del salón, un centro de mesa... Son pequeños pero tienen un gran efecto.
Alfombras también en verano
¡Que si que si! Hablamos de alfombras de fibras naturales. Si vas descalza, lo agradecerás. Elige entre estas y ¡pisa, morena!
6 fibras perfectas
- Yute. Muy suave, es perfecta para el dormitorio. Pero ¡cuidado! se mancha con facilidad.
- Sisal. Resistente y flexible, soporta el uso intenso. Se puede usar en el exterior, evitando el sol directo.
- Cáñamo. Resistente, aislante y fresco. Áspera de tacto, soporta el desgaste, así que ponla en recibidores o salones.
- Coco. Muy resistente a la humedad y al desgaste, aunque tiene un tacto áspero y rugoso. Perfecto para zonas de paso.
- Algas marinas. Lisas y de pisada muy agradable. Resistentes e impermeables, son ideales para cocinas y baños.
- Bambú. Son tablillas suaves, resistentes e ideales para zonas de mucho paso e incluso exteriores, pero hay que aspirarlas a diario.
Decora con frutas
Dan color y sensación de frescor. Pon un buen frutero como centro de mesa, un bol con limones en el salón, piñas en la cocina... Decorarán y perfumarán suavemente el espacio.
En otoño, que no decaiga
De calderas a ocres
Son los colores de la estación. Aprovecha para decorar con plaids, cubrecamas e incluso detalles decorativos y flores en estos colores. Darás luz de atardecer a tu casa.
Hace falta más luz...
Aunque no en tu casa si añades luces de ambiente. Cualquier rincón es bueno para colocar una pequeña lámpara de luz cálida o bien portavelas.
Tejidos con textura
Terciopelos, fieltros, lanas finas... Cambia las fundas de los cojines para vestirlos con ellos. Y añade tapizados en casa. Necesitas más calidez. Una calidez que puedas tocar y ver.
El bosque en casa
¿Te atreves a empapelar una pared como esta? Más otoñal, imposible. Además, le da una presencia al comedor elegante y acogedora.
¿Llueve? ¿hace frío?
No te deprimas. Es el mejor tiempo para crear. Deja salir la artista que llevas dentro y haz lo que más te guste: punto, scrapbooking, pintura... Puedes lanzarte a hacer pufs de punto, cuadros para tu casa, darle un nuevo aire a una pieza que ya te cansa... ¡Hay mil opciones!
Y de nuevo, invierno: pon tu casa de largo
Pisada confortable
Cambia las alfombras y ponlas de pelo largo. Darán calidez a la estancia al instante.
Doble cortina o estores y caídas
Las caídas, que lleguen al suelo, de linos gruesos o terciopelos. Incluso puedes elegir combinar dos colores, uno más claro y otro más oscuro, para ganar recogimiento. Además, las cortinas dobles aíslan más del frío.
Lanas que abriguen ¡y mucho!
De mohair, de punto grueso... Y en los colores que captan más el calor: grises oscuros, verdes, calderas, mostazas...
Madera, madera y madera
Nada más invernal que un espacio envuelto en madera. Y no hace falta tener una casa rústica. Hay pequeños detalles con los que podemos crear este efecto. Bols, cajas, maceteros...
Imágenes que te lleven a la nieve...
Las láminas con ilustraciones de animales o elementos naturales son tendencia. Aprovecha y cambia algunos cuadros de casa por láminas con ciervos, bosques invernales, etc. Y decora con detalles como piñas aunque no sea Navidad. ¡Verás qué efecto!
¿Qué? ¿Has visto alguna idea que vayas a llevar a cabo en tu casa? Pues te invitamos a que sigas navegando por nuestra galería de imágenes. Seguro que añades detalles a tu lista de favoritos.