¿Que la primavera solo la disfrutan los 'terraza-tenientes' o los privilegiados que tienen jardín? Nada, eso son habladurías. O eso o es que quien te lo ha dicho aún no ha visto cómo se ha plantado tan a gusto y resplandeciente en este balcón. La clave: elegir flores en los mismos tonos, colocarlas en varios niveles y reunirlas en jardineras. ¡Así disfrutarás de un mini-jardín particular perfecto!
Planifica: Un color
y distintos niveles
Una gama cromática
Hemos elegido rosas y fucsias y los hemos combinado en flores tan primaverales como azaleas, las clavelinas, las prímulas o las margaritas leñosas.
Y varios niveles
En el suelo hemos colocado las plantas más verticales como la lavanda dentada (en la maceta de barro) y el cleome. Las jardineras son perfectas para las combinaciones de flores y verde y, en el porche, reina la sutileza de las enredaderas: buganvilla y solano.
Para 'romper' con la línea de las jardineras y ganar movimiento, combínalas con plantas más verticales y trepadoras.
Trasplanta y sácalas al exterior
Hacia el balcón
Con el buen tiempo, muchas plantas de interior pueden salir al exterior. Sácalas de forma paulatina: déjalas en una zona luminosa pero sin sol directo. Hazlo con azaleas, prímulas, geranios o rosas mini, entre otras.
Cambia de maceta
También es buen momento para trasplantar. Elige una maceta entre 1 y 2 cm más grande que la anterior. En primavera, además, las plantas están en pleno desarrollo por lo que conviene abonarlas (cada dos semanas). Añade humus de lombriz.
Jardineras en flor, llenas de vida
Flores en rosa
En las jardineras comparten espacio: las prímulas en color fucsia; las lantanas moradas y las azaleas con pétalos con manchas blancas y rosas.
Verde con caída
La esparraguera equilibra los colores y da fluidez al conjunto, lo mismo que la estipa tenuisima, de hojas colgantes muy finas y vaporosas.
Mejor plantadas
Aunque puedes poner las distintas macetas dentro de las jardineras es mejor que las plantes juntas y que tengan el mismo sustrato.
Más nutrientes
El mayor volumen de tierra hace que las plantas se resequen menos. Además, acceden a más nutrientes y la jardinera se autorregula mejor.
3 flores que combinan bien
Prímula
También conocida como primavera, aunque florece al final de la estación, agradece una ubicación en semisombra. Sus hojas y raíces tienen usos medicinales.
Muscari
Sus racimos en azul son de los primeros en florecer en primavera. Requieren un buen drenaje, ya que el exceso de agua pudre sus bulbos.
Azalea
Aunque, en general, rehúye el sol directo, hay variedades perennes, como la índica de la imagen, que viven bien a pleno sol. Prefieren las tierras ácidas.
Si quieres seguir llenando de vida cada rincón de casa, ya sean espacios de interior como de exterior, no te pierdas todas las ideas e inspiración de nuestro especial primavera.