Y sobre todo, estáte atento. ¿De qué? De lo que llaman en Noruega el Winter SAD (Seasonal Affective Disorder), el Desorden Afectivo Emocional del Invierno, que suele atacar a aquellos que viven en países nórdicos, especialmente. Aquí tenemos la suerte de tener un arma invencible contra el SAD: el sol. Pero aun así, si tiendes a decaer con el cambio horario otoñal, no está de más que estés alerta de los cambios emocionales que sufras para ponerles remedio cuanto antes mejor.
¿Qué es el SAD?
Es un cambio bioquímico que sufre nuestro cuerpo a causa de la falta de sol. Los síntomas más evidentes son cansancio, somnolencia, fatiga, ansia por comer alimentos azucarados, sentimientos de tristeza, baja autoestima, irritabilidad y tendencia a encerrarse y huir del contacto social. Si algo de esto se está convirtiendo en un habitual de tu día a día, aprieta el botón de danger y ponte manos a la obra. Los tips que te hemos contado te ayudarán a revertir la situación. ¡Comprobado!