Recetas caseras de sabor tradicional, con ingredientes sencillos y económicos, y una cuidada presentación son nuestra propuesta para disfrutar en familia de la mejor cocina.
No hace falta estar de celebración para disfrutar de una comida especial. Rodéate de tus seres queridos y sorpréndeles con un menú diferente, presentado con gracia y mucho mimo, y una decoración digna de un gran restaurante. Y no te asustes, no es necesario que te gastes mucho dinero en el mercado. Los ingredientes que utilizamos para estas recetas son económicos y las cocciones, sencillas. Una sopa de cebolla gratinada os hará entrar en calor, una terrina de pato a la pimienta verde os deleitará el paladar y unas peras Bella Helena os refrescarán con el punto justo de dulzor. Para acompañar el café, puedes comprar un pastel o hacerlo tú misma: te proponemos un bizcocho de chocolate que es una auténtica tentación.
Ya lo ves: verduras, carne, fruta y un poco de chocolate pueden convertir un domingo cualquiera en un día inolvidable.
Para acompañar el menú, elige un vino tinto para el entrante y el plato principal, y un cava rosado para el postre.
Y viste la mesa con sus mejores galas: un mantel doble hasta el suelo, la vajilla y la cubertería de los días de fiesta y un centro de bulbos de jacinto para añadir un toque de color natural.
Si quieres que la sorpresa sea total, mantén la comida en secreto. Debes conseguir quedarte sola en casa para poder ultimar los detalles: poner la mesa, atar a las servilletas una tarjeta con el nombre de cada uno y, si tienes tiempo, preparar un detalle decorativo para colgar en la pared, con el nombre de los platos estampados sobre tela y unas cuantas fotos de familia sobre un soporte de alambre. Serán el mejor tema de conversación para la sobremesa.
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