¿Estás cansado de la monotonía cada vez que entras por la puerta de casa?, ¿sientes que te aburres de que todo esté igual?, ¿quieres darle una vuelta pero no quieres liarte la manta a la cabeza? Tenemos la solución a todos tus problemas. Si hablamos de hacer un cambio semiradical, que no te implique mucho zafarrancho, ni tener que gastar demasiado dinero, pinta las puertas, es fácil y amarás el resultado.

Deco sana
Doctor Color: tonos que curan sin receta
Has de tener en cuenta el color de las paredes y de los muebles para darle armonía al ambiente y con ello empezar a jugar. Por ejemplo, si tienes las paredes pintadas de verde claro, puedes darle a las puertas un tono mucho más intenso, el contraste será espectacular. Si lo que buscas es un efecto más suave y menos evidente, haz lo contrario, elige un tono suave y más neutro.
También puedes acompañar el color que hayas elegido para las puertas, con elemento decorativos tales como los cojines, un florero, los cuadros, las alfombras, etc. Verás que bonito ambiente se crea con pocos detalles pero bien cuidados.