¿Sabías que el diseño escandinavo fue ninguneado hasta los años 50? Y fíjate ahora... ¡es el amo! Y no solo porque Ikea haya "democratizado" la decoración, sino porque la filosofía escandinava ha demostrado que es capaz de decorar la casa perfecta para ser feliz.
Calidez desde el frío
El estilo nórdico, a pesar de ser tan blanco y tan abierto, abriga. Es una mezcla de simplicidad, funcionalidad y minimalismo con raíces en Dinamarca, Noruega, Suecia y Finlandia. Pero aquí, minimalista, no significa sin gracia. Al estilo nórdico no le gusta cargarse de muebles y complementos, al contrario, prefiere los espacios relajantes que inviten a la calma, y esto implica cierto "vacío". Para el estilo nórdico, todo lo que coloques en casa debe tener una utilidad. ¿Y no hay espacio para los detalles decorativos? Sí. Siempre que te relajen y te aporten recuerdos positivos. Un toque de hygge, vamos. ¿De qué...? De hygge, el secreto danés de la felicidad. ¿Te interesa? Pues sigue leyendo.