Cajas forradas para los juguetes, soportes divertidos para colgar fotos o invitaciones, mini-cajas para piedras “preciosas” y demás secretos. Hay mil cosas que puedes hacer por ellos... ¡solo con imaginación!
Percheros con forma de árbol, firmamentos cuajados de estrellas que se iluminan al apagar la luz, murales en la pared con escenas de uno de los cuentos más leídos...
Los muebles a medida, prácticos y con mucho espacio para almacenar, son a buen seguro imprescindibles, pero también lo son algunas ideas imaginativas que, además de resultar decorativas, ¡encantarán a tus hijos! Para ello, no hace falta contar con grandes presupuestos. Un recurso con muy buena acogida por parte de los niños es poner su nombre “a todo”, sobre todo si comparten habitación. Unas letras de madera en la puerta de entrada, en el estante de arriba o en el cabecero de su cama personalizan sus cosas y les hacen sentirse “importantes”. En este afán por rotular o bordar tampoco puedes dejar de lado la opción de utilizar bolsitas o forros de cestas para indicar qué tipo de juguetes se van a poner ahí, tipo “puzzles”, “cuentos”, “peluches”, etc.
Otra idea que resulta muy práctica para los niños, y que queda muy bien, es colocar cintas de pasamanería sobre plafones de madera forrados de una tela decorativa (mejor si es lisa). Se trata de una alternativa original a los clásicos paneles de corcho. Con ayuda de unas pinzas –juega a pintarlas tú misma con ellos– pueden colgar notas, fotos, invitaciones de cumpleaños, etc.
Por otra parte, las paredes de la habitación te ofrecen un sinfín de recursos decorativos que van desde un original papel pintado en uno de los paneles (por ejemplo, sobre el cabecero de la cama) hasta la posibilidad de plasmar en ella historias, cuentos o aficiones de los niños a través de murales pintados. Árboles, montañas, pájaros, flores, balones, tutús de ballet..., puedes jugar con los motivos que quieras. Y si no tienes presupuesto para encargar un mural, puedes optar por los vinilos, más económicos y con una oferta variadísima que incluye desde motivos diminutos hasta murales enormes.
Por último, no podemos olvidar a las reinas de las habitaciones infantiles... ¡las pizarras! Tienes mil opciones para colocar una en su habitación. Desde la clásica pizarra enmarcada hasta la mesa con sobre de pizarra, pasando por la “pintura de pizarra”, que puedes usar en paredes o muebles. ¡Y que pinte lo que quiera!