La Navidad es para los niños. Niños pequeños y también grandes. Y es que la felicidad de las fiestas ya se respira en esta masía del Empordà, reformada por el arquitecto Pepe Cortés, en la que se ha creado una zona independiente, como un apartamento, para los más pequeños, con espacios de juegos y dormitorios. “Es el sueño de cualquier niño”, nos comenta Olga Gimeno, de Bona Nit, diseñadora de todo el espacio, desde los muebles hasta el último de los detalles.
Pero volvamos al principio. El centro del universo de Gerard, Marina y Claudia está ahora en esa gran mesa blanca transformada por unos días en una improvisada oficina de correos, sobre la que escriben las cartas a Papá Noel o los Reyes, dibujan felicitaciones o hacen apresuradamente manualidades para adornar la casa. Y en el centro de la mesa... el árbol de los deseos. Un árbol natural seco y blanco del que cuelgan guirnaldas de luz, bolas, felicitaciones y mucha ilusión.

Un día lleno de magia
Una Navidad con los niños en el campo
“Aquí se respira una Navidad diferente –nos cuenta Olga Gimeno–. La he imaginado más natural y salpicada de tonos fucsia y verdigrís con detalles hechos a mano, como el árbol de palés y borlas de paja, el trineo de madera pintado por Magda Playà, las bolas de ganchillo y los números del árbol verde...”. Son detalles con paletas de color que evocan la naturaleza al igual que todo el mobiliario: el verdigrís, el blanco roto y los tonos grisáceos combinados a la perfección con las paredes desnudas de piedra natural.
Junto a la puerta que da acceso al dormitorio, en la casa de madera hay mucha actividad. Es una zona de juegos, con una cocinita donde los peques cuelgan sus recetas preferidas, en una pizarra magnética o preparan galletas. Y justo enfrente, nos espera una gran sorpresa, quizá la mayor: una cabaña para esconderse y jugar. A sus pies un chill-out decorado con cojines y colchonetas multicolores en el que los niños descansan después de horas de trabajo. Y el tobogán, iluminado por una guirnalda de luz, que nos baja de golpe hasta una flecha que dice: “Al Polo Norte”...