Recibidores pequeños con buenas soluciones

Actualizado a 22 de febrero de 2018, 13:13

Un colgador y un cesto como únicos elementos.

En pocos metros utiliza las piezas imprescindibles. Paragüero de hojas de banana trenzadas, de Jardiland.

En una zona de paso.

Recibidor con consola y lámpara modelo Romo, de Becara.

Un banco: práctico y decorativo.

Banco con colchoneta en capitoné de yute, de Becara. Alfombra de fibra sintética, de Bolon. Arrimadero alto empapelado.

Clásico en tonos piedra.

Consola antigua estilo Luis XVI y espejo con marco de madera dorado, en Ana Ros. Arrimadero pintado y rematado con madera. Farolillo metálico a modo de portavelas, en Flamant.

Con un baúl para guardar.

Paredes de piedra vista. Pavimento de toba. Baúl de herencia y colgador, de La Bicoca.

Abierto al salón.

Pavimento de pino tea. Consola francesa de nogal pintado y espejo, en Isabel Madinabeitia. Focos dobles empotrados en la escayola, en Suseta Iluminación.

En blanco para ganar luz y amplitud.

Vista del comedor desde el recibidor. En el recibidor, balda volada lacada y espejo, modelo Four Seasons, de Porada, todo en Nartex. Alfombra de algodón, de Liz Claiborne, en Rovel. En el comedor, mesa, modelo Azimut, de Cattelan Italia, y sillas de cuero y acero, modelo Lineal, de Andreu World, todo en Nartex. Mantel de algodón, de Polisón. Pavimento laminado, de Balterio.

Aprovechando el hueco de la escalera.

Armario en el hueco en la escalera de obra, las huellas de los escalones son de barro cocido y rematadas con un listón de madera. Perchero y paragüero de pino esmaltado, de Pomax. Suelo de barro cocido.

Una cómoda como mueble principal.

Recibidor con escaleras de acceso a la segunda planta. Cómoda, en La Pequeña Inglaterra. Espejo, en La Albaida. Pavimento de madera de roble.

10.

Un recibidor, dos espacios.

Cómoda, modelo Luis, de Alquería. Lámpara de sobremesa gris patinada, de Blanc D'Ivoire. Arrimadero blanco, modelo Multiwood, de Leroy Merlin. Papel de la pared, modelo Blossem, de Coordonné. Alfombra, modelo Haiku, de Kp.

11.

Decorado con muebles de almoneda.

Banco adquirido en una almoneda. Consola, en Mercantic. Lámpara de techo, en Antic Centre. Perchero, en Bicoca. Carpintería y vigas del techo pintadas de azul.

Muchas casas cuentan con un recibidor demasiado pequeño, estrecho o casi inexistente. Si este es tu caso aquí encontrarás las mejores ideas para darle utilidad con pocas piezas bien escogidas y mucho carácter. ¡Y mira nuestra galería! Verás más de 10 recibidores pequeños que a buen seguro te inspirarán.

Piezas proporcionadas

Para conseguir decorar adecuadamente un recibidor pequeño, lo principal es elegir piezas de tamaño proporcional al espacio y que adelanten el estilo decorativo del resto de la casa a modo de carta de presentación.

Busca la luz natural

Por sus características, acostumbran a ser zonas poco luminosas por lo que, siempre que sea posible, se debe intentar potenciar la entrada de luz natural. La elección de una puerta de entrada acristalada o de visillos para la ventana son dos soluciones fáciles pero muy efectivas para multiplicar la claridad.

Aprovecha el espacio

No des ningún espacio por perdido, ya que en un entrante de apenas 20 cm puedes tener una pieza de apoyo y almacén. Lo fundamental es dejar unos 90 cm para circular y si quieres no abigarrarlo, decorarlo con un solo mueble; aquí tienes algunas ideas:

Un banco de poco fondo.
Una balda abierta y de poco fondo –lo habitual son unos 25 cm–: es una buena alternativa para disfrutar de una superficie de apoyo sin llenar demasiado el espacio.
Una simple repisa. El sobre de un cubrerradiador puede servir de apoyo y apenas ocupa espacio.
Una banqueta descalzadora o un zapatero, que te servirá, además, para almacenar.
Una cómoda. Con 20 centímetros de fondo bastará para dejar la correspondencia y las llaves.
Una consola, mejor con cajones para almacenar.
Un colgador o un perchero. ¡Y guardarás la ropa de calle!

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