Ordenar es fácil si tienes claras las claves y las conviertes en rutina.
Solo lo justo
Antes de organizar la cocina, quédate solo con lo que usas y necesitas. Si tienes utensilios o electrodomésticos que ocupan y no utilizas, regálalos. Y lo que esté estropeado, tíralo.
Define las áreas
Para que la cocina no sea un caos, todo (menaje, utensilios, comida...) debe estar agrupado y cerca de donde se necesita. Es decir, reúne los alimentos en una zona, el menaje en una vitrina...
Despeja la encimera
Los expertos en orden apuestan por tener en ella como máximo 3 utensilios. Sobre todo, que sean cosas que usas a diario, de lo contrario que estén guardadas. Puedes aprovechar el antepecho con ganchos y barras.
Divide y vencerás
De nada sirve tener muchos armarios y cajones, si no están organizados. Para que nada se mueva y todo tenga su sitio usa cajas o cestos en su interior. Mídelos primero para decidir qué combinación los aprovechará mejor.