Lavadero

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Sin juntas, más higiénico

El fregadero es de Corian y se prolonga para convertirse en encimera. Así queda más integrado y se ve más grande. Y por otro lado, es mucho más limpio porque al no tener juntas, no se acumula la suciedad. Junto a él, una estantería abierta para tener los jabones a mano. 

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Cuarto de lavado

La antigua cocina era cerrada y estrecha. Ahora se ha abierto al salón y se ha dividido para crear un cuarto de lavado y plancha anexo con ventana. En el presupuesto hay que crear tabiques de Pladur nuevos para delimitar el espacio, derribar el tabique existente para crear el hueco de la ventana e instalar una ventana pequeña (precio: 750 €).

Tendedero.

Tendedero.

El Mueble

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Aprovechando que tiendes...

Pon del derecho las prendas y cuélgalas estirándolas bien, colocando las pinzas en las costuras y sin amontonarlas. De este modo, te ahorrarás horas de plancha. Garantizado. 

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La ropa sucia, se queda oculta

 Si tienes lavadora y secadora y no sabes dónde meterla, hazle un armario a medida que te permita colocarlas una al lado de la otra y tener todo lo necesario para hacer la colada en el mismo lugar.

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Usa organizadores

No tengas todos los productos amontonados, lo mejor es que los clasifiques: lavavajillas, brillo y sal; quitagrasas; detergentes y suavizantes… Puedes colocarlos en cajas fáciles de extraer o cestas para llevártelos cómodamente allí donde vayas a limpiar y ponerlos es un hueco junto a la lavadora. 

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Coloca armarios

 Siempre que el espacio te lo permita, alíate con los armarios. Primero, porque puedes guardar la ropa limpia aún por planchar y de este modo queda recogida y oculta y segundo porque también puedes organizar una parte del armario para almacenar la ropa del hogar como las toallas y las sábanas e incluso la ropa de temporada y de ese modo liberar espacio en los armarios del dormitorio

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Gana espacio

Si colocas la secadora y la lavadora de manera horizontal, es decir una junto a la otra, pon una encimera sobre ellas. Es una gran opción no sólo a nivel estético sino también a nivel funcional ya que te permitirá tener los productos de limpieza a mano o por ejemplo dejar una cesta para colocar la ropa ya limpia y seca y luego guardarla.

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Piensa en vertical

 Si reservas una estancia -aunque sea pequeña- para el lavadero piensa también en tener una zona de secado y planchado. Puedes usar las paredes para colocar una barra que sirva para tender aquellas prendas de ropa que no pueden ir a la secadora. De este modo, no tendrás que tener una sisí que ocupa mucho más espacio.

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Panela los electrodomésticos

Cuando hay que compartir espacios lo mejor es que el lavadero se vea lo mínimo. Panela la lavadora y la secadora para que se integren con el mobiliario de dicha estancia y de ese modo no romperán con la estética decorativa. 

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Juega al escondite

Si al panelar disimulamos los electrodomésticos otra opción es esonderlos. ¿Cómo? Creando "falsos" armarios cuando en verdad puede ser que te encuentres con todo un lavadero o el rincón para guardar la tabla de planchar. 

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Un lavadero a medida

Si los pisos ya de de por sí son pequeños, contar con un espacio para el lavado y el planchado, muchas veces es un lujo de unos pocos. Y además, los metros suelen ser escasos. Por eso, es frecuente encontrarse que, o no caben armarios con medidas standard o sobran unos 10 cm entre la pared y el mueble. Los muebles a medida en un lavadero pueden ser una gran opción para no desaprovechar esos preciados centímetros.

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Compartiendo el mismo espacio

Si reservas tu lavadero en un lugar como en la cocina porque no tienes otra estancia donde colocarlo puedes ocultarlo con puertas correderas, ya que éstas apenas ocupan espacio.

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Usa accesorios de almacenaje

 Y que a la vez sean prácticos y decorativos, como los ganchos, barras o los cestos de mimbre. Puedes tener uno para la ropa blanca y otro para la de color. De ese modo, al poner la ropa en la lavadora los colores no se mezclarán. Las bandejas de fibras naturales también te pueden servir para que, una vez la ropa esté planchada, colocarla y llevarla al armario donde se guarda.

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No te olvides de los detalles

La toma de corriente es importante así que cuando pienses en crear tu zona de lavado no te olvides de todos los enchufes que vas a necesitar: lavadora, secadora, plancha... Y sobre todo, un lavadero debe tener una buena iluminación. Para que sea homogénea y con pocas sombras utiliza luces led.

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Aprovecha para limpiarlo bien

Tras dejar la superficie sin materiales levantados ni óxido, hay que limpiarla bien con agua y jabón. La idea es dejarlo limpio de suciedad, grasa y polvo. Y luego hay que secarlo bien para evitar humedades una vez apliques la pintura, pero ¡ojo! no utilices trapos que puedan dejar pelusas.  

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¡Qué bien huele!

El uso de secadora hace que el aroma del suavizante perdure más en las prendas. Por no hablar de que las salva de ese olor de cuando a tu vecino se le ocurre hacer sardinas, brócoli o barbacoa, mientras tu tienes tus camisetas preferidas tendidas en el patio de luces...

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Si no usas el programa adecuado...

Puede que tus prendas noten un pequeño desgaste, incluso encojan. Las secadoras son ideales para sábanas y toallas, pero no para tus prendas delicadas. 

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Todo tiene un límite

La vida útil de una secadora se estima en 10 años. Esto no significa que dejará de funcionar después de una década, pero su rendimiento puede ser menor o puede ser que comience a consumir más energía.

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Lavadora secadora

Si la falta de espacio apremia, no queda más remedio que apostar por un aparato que aglutine las dos funciones: lavar y secar. Además de ahorrar espacio, al tener doble funcionamiento resulta cómoda, ya que no hace falta que traslademos la ropa a la secadora. Eso sí, los aparatos independientes son más eficaces, porque no estamos exigiendo en un mismo electrodoméstico dos funcionalidades. Por tanto, habrá más probabilidades de que una lavadora-secadora se estropee.

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Secadora = mayor calidad de vida

Lo que realmente estropea la ropa son los rayos UV del sol, decolorando las prendas de color y amarilleando las blancas. Las secadoras de hoy en día cuidan de las prendas, protegiéndolas del desgaste, con programas específicos para cada tipo de tejido. Además, si no tienes espacio para tender, son un must

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Las mejores secadoras

Son las secadoras con bomba de calor, que llevan los consumos eléctricos apenas a los 200kWh/año (para un promedio de 160 ciclos al año) y que harán que el coste eléctrico no supere los 4 € mensuales adicionales. Podrás secar prendas voluminosas fácilmente, disminuyendo las arrugas, incluso llegando a prescindir del planchado en algunos casos, lo que también disminuirá el tiempo de planchado y su coste energético correspondiente.

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Más ventajas de la secadora

Es ideal para las personas alérgicas porque su alta temperatura mata los ácaros. El proceso de secado puede alcanzar temperaturas de más de 70°C. Además ganarás tiempo, ahorrarás esfuerzo y podrás tener la ropa del cole o el uniforme del trabajo siempre preparado en poco tiempo. ¡Se acabó mirar la previsión meteorológica para poner una lavadora!

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¡Tachán!

Un completísimo lavadero aparece tras las puertas acristaladas. Un rincón donde no falta detalle y bien oculto, para no distorsionar la imagen de esta cocina tan familiar y elegante.