Comedores exteriores

"El exterior es una de mis zonas favoritas —revela Carolina—. En todo momento he buscado que esta sea una casa donde venir a relajarse y disfrutar del entorno. Por eso, he plantado cipreses, olivos y plantas aromáticas, y he creado un agradable comedor a la sombra con una pérgola de hierro y cañizo que queda muy campestre". 

La enredadera de trompeta tiene, como su propio nombre indica, unas flores en forma de trompeta en unos característicos tonos vivos como el rosa, naranja y el amarillo. Esta planta trepadora es ideal para pérgolas soleadas, ya que disfrutan de la luz directa. Su rápido crecimiento y su capacidad para cubrir espacios grandes la convierten en una opción perfecta para añadir privacidad y color a tu pérgola.

Plantar buganvillas (Bougainvillea spp.) en el jardín es una garantía indiscutible de disfrutar de todo un espectáculo cuando llegue el buen tiempo. Su floración es larga y espectacular y, como se trata de una especie trepadora que crece bastante rápido, pronto se convertirá en el elemento decorativo más destacado de tu jardín.

Es perfecta para climas mediterráneos, donde los inviernos suaves no suponen un riesgo para ella. Eso sí, tendrás que proporcionarle algunos cuidados como colocarla en un espacio luminoso o regarla con moderación. Desde el principio de la primavera y hasta que termine el verano, le vendrá de maravilla que le proporciones un abono líquido para plantas de flor.

Otras de las ideas de estilo marinero que te trasladarán de inmediato a la playa, son los corales. Puedes colocarlos como veíamos en la imagen anterior, pero si no los tienes toma nota: busca láminas de acuarelas con estos elementos marinos y verás lo bonito que queda. Completa el look con un mantel en azul y blanco, hortensias azules y ¡estarás en la playa!

"Está asomado a la bahía de Aiguablava, que en verano se llena de barcos. Por eso lo decoramos con un look muy mediterráneo", nos explica Anna, que ha colaborado con el arquitecto Pepe Gascón. Precisamente, para la decoración de la terraza se ha optado por el blanco y el azul, el dúo ideal. 

Otra propuesta que nos encanta en El Mueble es esta en la que el protagonista es el bambú. La caña da sensación de ligereza, cumpliendo, eso sí, la función de resguardar del sol directo y proporcionar un espacio de sombra para los días de verano. ¿Lo mejor? Que tanto el techo como el suelo son de bambú, pero las fibras naturales también son las protagonistas de las sillas y sillones, la panera y los bajoplatos. Un rincón muy acogedor en el que disfrutar del verano.

“Poner una mesa es todo un arte. Y en verano, y en una casa de playa, una mesa de temática marinera es un acierto. Si tienes un mantel blanco, como el de todo el mundo, puedes personalizarlo con unas aplicaciones o pintándolo con una plantilla. No es nada complicado y así lo harás único", indica la estilista. "Además, piensa en cada detalle. Me gusta combinar vajillas de varios colores, aquí blanco y azul, y sorprender con algo. Aquí limpié unas conchas de mar y las usé como salero. ¡Quedó genial!”. añade Carmen. 

Sucede como en el caso de la zona de estar, el comedor tiene que estar listo con todas las comodidades para usarse. Pon la mesa con detalle y mimo. Y disfruta de comidas y cenas fuera. Mucho lino en la mantelería, algunas plantas, salvamanteles, sillas cómodas y una alfombra para que al pie descalzo sea más agradable el tacto.

"La Marbella auténtica tiene una gran herencia árabe, y el propietario la quiso subrayar con detalles como la lámpara negra del office o la pérgola que hizo construir a medida en el porche, como un anexo a la cocina", sigue Mar. Según Gerardo, este comedor interior-exterior es el centro de la vida en familia. "El sobre de la mesa es, en realidad, una puerta antigua recuperada", nos confiesa.

Si la piscina es lo más en este porche ibicenco, su cocina de obra no se queda atrás. Justo al lado del salón, se diseñó un bonito comedor de verano y una cocina exterior de obra con espacio suficiente para una nevera pequeña, un fregadero, un armario bajo y una plancha para cocinar. Como puedes ver en la foto, otro elemento clave en el diseño de este porche ibicenco es su banco, también de obra y de color blanco, que remata la estancia del salón.

Las decoradoras querían llenar de vida este porche andaluz, por eso, el amarillo es una de sus tonalidades protagonista. Querían crear un espacio que fuera un viaje a la selva, de ahí que casi todas las piezas fueran de bambú. Remataron la mesa del comedor con una alfombra de gran tamaño para darle un toque de más cercanía a la estancia y hacerla más acogedora.

Una mesa de madera robusta en una terraza es lo más elegante que existe en este momento en el mundo de la decoración. La belleza natural de la madera la hace visualmente atractiva, y, además, al ser un material sólido, robusto, duradero y resistente, es ideal para que disfrutes de tus comidas al aire libre.

Para dotar a tu terraza de una atmósfera relajante, una idea muy práctica, y elegante, es colocar una lámpara colgante en el centro de la estancia que esté fabricada con fibras naturales. Este tipo de lámparas ofrecen una iluminación muy cálida y acogedora, cualidades perfectas para no querer moverte de tu terraza en todo el verano.

Si tienes un jardín en casa, plantéate la posibilidad de crear una cocina exterior. ¡Son tan prácticas en verano! ¿Quieres un diseño elegante? Fíjate en esta proyectada por la interiorista Synne Brendmoe. Cuenta con barbacoa y una gran mesa de comedor. Y lo mejor de todo ¡está conectada con la cocina principal por una ventana! Una vez más las líneas entre interior y exterior se difuminan.

No es un secreto que en El Mueble nos apasiona el lino: fino, grueso, lavado, apergaminado... Este verano va a ser el textil por excelencia. ¡Y es que es tannn elegante! Una prueba de ello es la colección reeditada Nicos de la firma Alhambra que aumenta en 2023 su paleta cromática hasta en 25 tonos. Ocres, mostazas, grises, beiges, azules o verdes, suaves y vaporosos son perfectos para cortinas, visillos, equipar la cama o vestir la mesa. 

Trata tu terraza como tratas al resto de tu casa: cuidando cada detalle. Por eso, no menosprecies a tu comedor de exterior y dale la atención que se merece. Un mantel de lino, un jarrón con flores y una vajilla bonita trasladará la elegancia de dentro de tu casa afuera. ¡Las horas pasarán volando!

Aunque tu terraza sea pequeña también se merece lucirse. Y así nos lo sugiere Pia Capdevila: "Ilumínala para poder ver el ambiente desde el interior". ¡Pequeña sí, pero resultona! Utiliza apliques, lámparas de techo, guirnaldas led o solares. ¡Será la envidia del vecindario!

No los queremos ni en pintura, aunque sean más económicos. Debemos tender por un planeta más sostenible. Así que si estás pensando en equipar tu terraza o jardín con muebles de plástico o de falso ratán ¡frena en seco! Preferimos los muebles de madera o de obra. Solo admitimos muebles de plástico, si este es reciclado y reciclable.

Un ático con estilo y una terraza para copiar. Se trata de un espacio con vistas a los tejados de otras construcciones que goza de la privacidad que le da estar situado en lo alto. Se distribuye con una zona de estar con sofás y sillón en madera y un comedor exterior con mesa de madera también y sillas curvilíneas en ratán sintético. Las alfombras específicas in & out, zonifican cada ambiente.

Bien resguardado bajo el porche, el comedor exterior se disfruta durante todo el año, incluso los soleados meses de invierno. Aquí se hace mucha vida, por eso el paisajismo se ha cuidado al detalle, también. "En zonas estratégicas, apostamos por árboles de ribera, porque en primavera son muy densos y regalan privacidad, y en invierno pierden las hojas y dejan pasar la luz. Pero también hay arbustos de bayas comestibles, ¡e incluso un huerto privado!", explica Carlota.

Por su estética natural y versatilidad, este verano seguiremos sintiendo predilección por los muebles de madera y fibras vegetales. Ambos materiales se integran perfectamente en ambientes exteriores y se adaptan a una amplia gama de estilos y diseños.

No se necesita mucho espacio para crear un hermoso patio como el que se muestra en la foto. Puedes instalar una pérgola decorativa, una mesa redonda y sillas de madera decapada, y agregar muchas plantas ornamentales como las hortensias. Con estos elementos, podrás crear un ambiente acogedor y relajante, perfecto para disfrutar del aire libre. Además, las plantas agregarán color y textura, mientras que la pérgola brindará sombra y protección contra el sol. Con estos sencillos trucos, podrás transformar cualquier rincón exterior en un hermoso patio.

“La familia quería una casa acogedora todo el año y lo hemos conseguido con colores cálidos, piezas de madera y una mezcla de look natural y clásico”, nos explica Raquel Zárate, de Petit Côté Déco, la interiorista al frente del cambio (la reforma estuvo a cargo de Construccions d’Aro de la Bisbal).

"Al final, nos enamoramos de la que estaba al lado, se llama ‘El Sauco’ y era de un conocido. Así, pasó a ser nuestra segunda residencia", indica Natalia. Y es que se trata de una casa grande, de campo, pero súper cómoda porque está a 10 minutos de la ciudad. Tiene 3 hectáreas de jardín y una construcción de 550 m² en una sola planta. Se distribuye en cinco habitaciones dobles con baño, salón, cocina, una segunda planta con otra zona de estar y de juegos, un patio interior andaluz muy agradable y una piscina."Nos hace felices pensar que algún día nos retiraremos aquí", confiesa.

Para dar sombra, Araceli ha puesto una pérgola y estores de mimbre. Las sillas verdes dan color. "Me encantaría que la pérgola quedara cubierta con verde, pero aún no lo he conseguido. Y los árboles son regalos que me han ido haciendo", señala. 

El exterior tampoco se podía desaprovechar. Un comedor exterior, cubierto con una vela de sombreo y ubicado donde se disfrutan de las mejores vistas, fueron clave para conseguir que la propietaria se enamorara aún más de esta masía. 

"Las sillas de mimbre son un básico para mí. Siempre las recomiendo, y para dar un toque cálido en otoño son ideales", explica la decoradora Marta Tobella. Las fibras naturales tienen la ventaja de ser muy cálidas a la vista y, a su vez, resultar fresquitas en verano. 

En el porche, por ejemplo "introdujimos un tono amarillo, que da mucha vida", nos cuenta Flores. Combinado junto al bambú, presente en la mayoría de las piezas, la sensación es la de trasladarse a una selva amable y colorida. 

Si tienes una vajilla de plástico para las comidas de verano, te habrás dado cuenta de que con el uso continuo y al meterlas en el lavavajillas han perdido su bonito acabado y color. Si crees que ya no pueden aguantar ni un verano más, retírala y renuévala por una nueva. 

Con el paso del tiempo y si no les proporcionas los cuidados necesarios, los muebles de forja terminan por oxidarse y estropearse. Si ya no tienen solución, de este verano no puede pasar que los tires. 

El perímetro de este piso de la playa está dotada con una terraza en esquina, lo que hace que, desde todas las estancias que dan al exterior cuenten con una zona exterior que, aunque estrecha, deja espacio para una zona de butacas (que has visto en la imagen anterior) y un pequeño comedor exterior. 

Es habitual escuchar que el lino se arruga mucho, pero Martina nos lo rebate. Y es que la arruga es bella y más cuando luce una bonita combinación de color. "Al lino hay que dejarle un punto arrugado para que luzca su esencia. Ese punto imperfecto que lo hace más bonito", dice.   

"Una mesa con copas y vasos diferentes, servilletas de distintos colores o platos antiguos mezclados con los más nuevos puede quedar muy alegre y desenfadada", dice Martina. Y como vemos en esta mesa, ¡así es! La mantelería roja es la mejor base para unos individuales rosas y platos de distintos colores. 

Otro de los espacios exteriores es este comedor de verano en el que disfrutar de las mejores sobremesas. La mesa redonda de madera maciza invita a la conversación, mientras que el azul turquesa de la vajilla refresca el ambiente. 

Las terrazas también necesitaban un cambio. "Habían quedado desaprovechadas durante décadas. Cada habitación tiene la suya propia, pero la terraza que nos dio más juego fue la del salón, que cerramos con cañizo para preservar la intimidad de la familia", explica
Dara.

"Aunque las mesas y sillas son sintéticas, imitan la madera y eso nos permitió lograr un aire más hogareño". Con espejos en todas las estancias, el exterior entra en la casa. ¡Más clara que nunca!

Las vigas de madera del techo, las fibras naturales de los muebles y las plantas grandes aportan calidez y suman esa sensación de frescura mediterránea que tanto buscaban. En el porche y la zona de piscina, el suelo es de mármol, que continúa en el interior de la casa dándole unidad. 

En el porche, Genoveva puso un banco corrido. "Lo teníamos claro. El banco de obra era obligatorio, las puestas de sol sentados allí valen un potosí. En verano —nos cuenta— colocamos delante la mesa de madera que hay en la cocina, sacamos sillas de dentro, y ¡ya tenemos comedor exterior!"

Uno de los puntos fuertes de la casa era su fachada. Decidieron conservar la típica arquitectura menorquina para integrarla en el entorno: blanco para los muros y verde en puertas exteriores y contraventanas de teca e iroco. ¡Genial!

En la decoración de comedores exteriores, la madera, las fibras naturales y los tejidos como el lino en tonos neutros siempre son sinónimo de éxito, aunque también deberías anotar la idea de añadir un centro de plantas a la mesa.

Para darle más estilazo a un comedor de exterior pequeño puedes incluir objetos decorativos que lo hagan cómodo y acogedor. Por supuesto, la lámpara de techo es fundamental, pero también puedes añadir una de pie que aporte una iluminación ambiental muy agradable. 

Un patio exterior alargado y de escasas dimensiones invita a decorarlo con un comedor exterior que aproveche toda su largura. Para que sea cómodo deberás asegurar que haya espacio detrás de las sillas para favorecer un paso cómodo. 

Que el espacio en el que coloques tu comedor exterior sea pequeño no implica que haya que prescindir de la calidez. Sí, te hemos dicho que lo ideal son los muebles ligeros. Pero no solo debes tener en cuenta su estructura, sino también los materiales con los que están fabricados los muebles. Las fibras naturales son un comodín idóneo para conseguirlo. 

Un pequeño balcón siempre ofrece espacio para un comedor exterior mini. Y, aunque elijas una mesa de estructura ligera, puedes incluir un par de cómodos sillones que hagan que las sobremesas se vuelvan de lo más agradable. ¡Y mucho más si cuentan con esas impresionantes vistas!

Si quieres contar con una cocina exterior, pero no tienes espacio, puedes añadir al comedor de tu terraza una pequeña barbacoa redonda, que no ocupará tanto espacio. Si la mesa la eliges también redonda, el entorno se verá menos saturado.