En la zona de día, vemos linos, terciopelos, madera, los materiales preferidos de Pauli, y también su posesión más preciada (que ya es decir): su gran mesa de comedor, "regalo de bodas de mis tíos, hecha de madera sudafricana, que además es de Buenos Aires, de Laura O, que fue quien decoró mi boda". Cada vez lo tenemos más claro: en los objetos de Pauli está su alma.