Cojines

¡¿Cómo?! Lo que lees. No hay que cambiar el sofá, pero, si la tapicería está envejecida, manchada o deteriorada; puedes renovarlo con fundas adecuadas. Las fundas a medida son la mejor opción para que queden como una segunda piel. Y con fundas o trozos de tela también puedes tener cojines nuevos.

No tengas miedo al combinar los cojines con distintos estampados. La clave para acertar es elegir dos o tres colores que creen unidad. Después podrás mezclar distintos patrones sin equivocarte. ¡Quedará genial!

El estilo no está reñido con el confort. Y Martina nos lo enseña en esta terraza. Por eso, nada como dar más comodidad a las sillas que añadiendo unos cojines mullidos y de un tejido fresquito que amortiguen la sentada. 

Siempre hemos oído que mezclar rojo y rosa quedada fatal, en deco y en estilismo. Pero en esta terraza, Martina nos enseña cómo pueden quedar bien. El truco está en elegir un rosa un poco deslavado con un rojo intenso, como el de estos dos cojines de la marca de Lo de Manuela. Para suavizar su efecto, lo ideal es colocarlos sobre una base blanca, en este caso, el cojín de asiento. 

El dormitorio principal es cómodo y tan práctico como las paredes y el techo, revestidos de aislante. La cama se ha vestido en tres colores: blanco, beige y azul "por su proximidad al mar". Todo ¡muy Mediterráneo! "Para los textiles de la casa elegimos lino por su comodidad", apunta la dueña.

Detalles como los jarrones o la lámpara de mesa sobre la superficie que une las dos zonas de sofás, evocan la esencia rústica y artesanal de las casas del mediterráneo.

Para diseñar un porche de estilo mediterráneo que propiciara el descanso, el sofá se decoró con cojines de diversos tamaños y texturas que combinan los tonos azules y los crudos. El estampado principal son las rayas, típicas de la temporada estival.

Para decorar el sofá de obra, se eligió un cojín de suelo con vibras mediterráneas, combinando el blanco con las rayas azules. La vajilla también se escogió a juego en un bonito color azul sobre una bandeja de fibras naturales con forma redonda.

En El Mueble nos gustan los sofás muy mullidos, hacen que el salón se vea más elegante y vivido. Y los cojines ayudan a lograrlo. Lo ideal es poner uno más que el número de plazas del sofá. Es decir, en un sofá de 3 plazas, 4 cojines. Al colocarlos, mezcla cojines de diferentes formas y tamaños. Una idea: pon los cuadrados y más grandes en los extremos, e intercala en el centro otros más pequeños rectangulares o alguno redondo. Darás sensación de orden sin que el sofá se vea rígido.

Da en el clavo con ese "algo" que tiene un salón agradable y luminoso, que no sucumbe al paso del tiempo. Lo más importante, crear la base adecuada con un fondo neutro, un lienzo de tonalidades suaves en paredes y suelos que no se verá alterado por las modas. No solo pienses en blanco y madera, hay más combinaciones, aunque esta nos gusta y siempre funciona. Reserva los colores de moda o los del año para los accesorios y tejidos de menor tamaño. Blanco, beige, tierra, taupe, greige… en intensidades suaves combinan con todo. Son de por sí atemporales.

El sofá se hizo a medida para aprovechar al máximo este mirador. Si se necesita, se puede usar a modo de cama. Con muchos cojines, es perfecto para relajarse con un libro mirando el mar. 

Renovar por poco y ganar más sombra. También proteger la terraza de los insectos y darle un aire romántico con unos visillos ligeros ondeando con la brisa veraniega. Suma a la lista de cosas baratas con las que decorar una terraza este elemento y cuélgalo de barras de cortinas o de un cable con anillas y pinzas. Los tienes sueltos desde 5 € en Leroy Merlin y no tienes que preocuparte de coger el bajo, ya que quedan bonitos incluso con tela de sobra apoyada en el suelo.

¡Cuánta variedad de fundas de cojines puedes encontrar! Y eso hace que puedas adaptar el presupuesto y encontrar telas con las que renovar el aspecto de la terraza. Aprovecha los rellenos que tengas y coloca nuevas fundas de cojines. Incluso es barato lanzarse a la customización de los cojines existentes con botones, cintas de pasamanería, alguna cuenta de madera o borlas y pompones.

Decorar barato la terraza con palés y algo de ingenio da como resultado un espacio informal y desenfadado con mucho encanto. Para lograrlo (los palés se encuentran de venta en polígonos industriales desde 6 € o en tiendas como Leroy Merlin desde 13 €) es importante tratar la madera, lijarla, para que se vea cuidada. Y escoger bonitas colchonetas y cojines para hacerlos más confortables si se van a usar como asientos. También puedes usar sus listones como pavimento y "tirar" cojines de suelo directamente encima.

Un clásico como mueble de exterior (o no) que puedes encontrar a un precio barato y que encaja en la mayoría de los estilos decorativos. Como sillas alrededor de la mesa de comedor o como asientos auxiliares guardados (ya que se pliegan y ocupan poco). Al tener el asiento y el respaldo de tela son cómodas y fácilmente lavables en la lavadora. Leroy Merlin tiene un modelo por 43,99 €.

Si la tapicería de tu sofá es visualmente muy pesadas, no dudes en vestirlo con una funda de verano confeccionada con un tejido natural, en tono blanco o arena, que de menos calor e invite a tumbarte en él. Las fundas de lino son muy fresquitas, y su aspecto arrugado dará un plus de encanto a tu salón.

Si pintas o decoras el salón con los colores adecuados también puedes lograr sensación de frescor. ¿Sabes cuáles son esos colores? Es fácil: los tonos fríos: desde un verde aguamarina o menta hasta un azul celeste, turquesa, lavanda o violeta que, además, aportarán calma y bienestar.

Renovar las cortinas y los cojines es un cambio barato con el que se consigue un cambio renovador y te ayudará a decorar tu casa de campo. Puedes utilizar tonalidades suaves en tonos fríos, como verdes y azules lavados, que te ayudarán a percibir el ambiente como más refrescante y relajante. Ahora, tu casa de campo sí que está preparada para recibir.

Las dos influencers deco consultadas, acostumbradas a recibir likes por la decoración de sus espacios tanto interiores como exteriores, coinciden en que no pueden faltar los detalles coquetos y cuidados en una terraza bien montada.

Patricia Gómez añade "bonitos textiles, cojines de exterior, velas, guirnaldas solares y algún plaid, que viene genial para las noches más refrescantes".

En este sentido, el consejo de San García es "buscar el equilibrio para destacar lo que más te importa. ¡Menos es más! Si llenamos la terraza de cosas bonitas, ninguna será protagonista. A mí me gusta crear un ambiente desahogado para poder disfrutar de rincones diferenciados y con personalidad, ya sea con muebles o complementos que te llaman la atención a primera vista".

"No debemos olvidar que hay que resguardarse del sol. Techar una zona que nos servirá para las comidas en la terraza o jardín en pleno verano es primordial", recuerda Patricia Gómez de Mamiandchic. Y el techado puede lograr muchos likes en Instagram cuando subas esa foto del espacio bañado por algo de sol, pero con sombra. Para esta influencerlos toldos son muy acertados "pues una vez que no sea necesario utilizarlo, queda recogido y visualmente la zona se mantiene limpia y despejada".

Aunque sea un tema funcional, bien resuelto y explicado no solo inspirará a tus seguidores en las redes, sino que te dará likes. "No nos olvidemos de tener una zona de almacenaje, ya sea un baúl o muebles con capacidad en su interior para poder recoger cojines, textiles y demás accesorios, durante los días de lluvia o simplemente para mantenerlos almacenados en temporada de invierno", recuerda Patricia Gómez. Esos muebles funcionales, soluciones a medida y otras piezas pueden ser tremendamente bonitas en tu espacio al aire libre.

Lino y algodón son dos de los tejidos que más nos gustan en El Mueble para decorar. Pero cuando se echa el frío, también la lana. Los textiles naturales son perfectos, pero has de asegurarte de que, si apuestas por la sostenibilidad y quieres un hogar libre de tóxicos, no tengan tintes o no se hayan usado pesticidas. El algodón orgánico y el lino son dos de los textiles más naturales y sostenibles que existen. Úsalos en tapicerías y fundas de asientos, cortinas, visillos, matelería, cojines…

Con la mezcla de piezas de estilos diferentes también lograrás una decoración muy atractiva y personal. La clave está en buscar un hilo conductor, elementos o colores que contribuyan a unificar el conjunto como se hizo en este salón, en el cual las paredes blancas y el suelo de lamas de madera dan sensación de unidad visual.

Hace unos años, lo habitual era elegir todos los textiles del dormitorio de la misma colección; sin embargo, en la actualidad se considera un error estilístico que resta personalidad. Por tanto, tiraría los textiles coordinados de épocas pasadas, cuando se hacían la colcha, las cortinas y los cojines a juego, todo tapizado coordinado con telas de una misma colección.

El elemento más deseado de una piscina es, sin duda, un espacio para darse un baño. Se puede lograr con mini piscinas o jacuzzis de exterior. Eso sí, el proyecto debe estar supervisado por un técnico competente para comprobar que la estructura de la terraza soporta el peso que aporta. Si eres afortunada, podrás tener una en tu espacio exterior. Conviértela en el elemento central en torno al que gire el resto de la decoración.

Si a tu patio pequeño le faltan asientos, créalos. Por ejemplo, las interioristas Natalia y Dolors Roma se inventaron este banco improvisado en el alféizar de la ventana. Una colchoneta, unos cojines mullidos y coloristas ¡y listo! También puedes colgar del techo o de la pérgola un asiento colgante. ¡Así le darás un look actual a tu mini patio!

Si hay algo que nos gusta cuando aprieta el calor, es echarnos una cabezadita después de comer. Si tu patio pequeño cuenta con árboles frutales, aprovecha la sombra que den para convertirla en una zona de relajación y desconexión. ¡Y qué mejor para ello que colgar una hamaca donde evadirse! Es lo que han hecho los interioristas de The Room Studio.

Si vives en una casa con una arquitectura contemporánea, seguro que encuentras inspiración en recibidores modernos como el que acompaña estas líneas. Apuesta por una tonalidad profunda para pintar la pared –si encaja con el color de la carpintería, mucho mejor– y decóralo con pocas piezas, pero muy bien escogidas. El color puede ayudarte también a pasar de un recibidor clásico o rústico a un ambiente más actual. Juega con colores fríos en tonos oscuros y, además de dar a la decoración un look más moderno, conseguirás realzar el mobiliario de madera clara o natural.

A la hora de vestir el sofá con cojines, es muy importante no pasarse de colores. "Mi consejo es apostar por tonos suaves, así no te cansarán ni saturarán visualmente el salón, y mezcla solo una dos paletas de color", sostiene Sol. 

"Los textiles son grandísimos creadores de ambiente, por eso tienen mucha presencia en las casas publicadas en la revista. No te cortes: introduce cojines de diferentes tamaños y juega también con las formas (redondos, cuadrados, rectangulares...). Repártelos en las diferentes estancias de la casa. De colores empolvados, funcionan muy bien", explica Paula. 

"Te aconsejo tener siempre dos juegos de fundas de cojines con la misma base de color para que vayan bien todo el año con el resto de decoración. Un juego más invernal, y otro que podemos sacar ahora, con colores más frescos para primavera y verano, que es cuando los textiles deben ser más luminosos. Te recomiendo linos, algodón y lonetas en tonos frescos", explica Pia. 

Los cojines siempre son el broche de oro al estilismo de cualquier salón. Nuestro consejo es que elijáis una gama cromática y combinéis distintos matices y tonalidades generando armonía. Lisos, estampados, con texturas... pero siempre en la misma gama para que el resultado quede equilibrado.

Leer debería ser una experiencia 100% confortable, por eso es fundamental que contéis con un rincón de lectura en el salón. La butaca ha de ser tan cómoda como bonita, con cojines decorativos y una mantita (por si os entra el frío), y tampoco puede faltar una iluminación adecuada. Para estos casos, lo mejor es añadir una mesa auxiliar junto a la butaca, con una lámpara de mesa.

Los sofás con faldón y brazos redondeados son los más elegantes, por eso nos parecen idóneos para salones de parejas de 50 años. Si queréis restarle un poco de seriedad, podéis escoger la tapicería de lino, un tejido fresco y atemporal.

Otra opción que potencia la elegancia en cualquier salón para parejas de mediana edad es elegir un espejo con el marco dorado, especialmente si se trata de alguna pieza de anticuario, con historia 'a sus espaldas'. Podéis colocarlo apoyado en el suelo o detrás del sofá, colgarlo en la pared...

El beige debería convertirse en vuestro color fetiche a la hora de decorar el salón. El blanco también es válido, pero el beige tiene ese puntito de calidez que siempre suma. Nuestra recomendación es que lo elijáis para los muebles más grandes, como sofás y butacas. Esta base neutra os permitirá jugar con otros elementos como los textiles, y cambiarlos en función de la estación.

Luz amarilla -porque resulta más cálida y cofrotable a la vista- y con posibilidad de crear una iluminación tenue. Los regulares de intensidad son una buena opción. No debe faltar la iluminación puntual para leer junto a la cama pero sin descuidar la ambiental. Cuida que todas las bombillas sean del mismo tipo de luz.

Así es esta pequeña terraza a la que, sin embargo, no le falta detalle. Gracias al sofá en esquina y a la perfecta combinación de cojines y almohadones, que mezclan el blanco y los colores cálidos como el mostaza o el caldero, se ha conseguido un ambiente cómodo perfecto para abandonarse al relax. Las plantas ponen la nota verde y natural.

Hay celosías de jardín, terraza, patio... Y también de porche. ¡Mira qué original es esta! Su trazado en arco enmarca la puerta de entrada, dándole un encanto especial. Se trata de un dintel de celosía en madera y cristal, elegido por la interiorista Rosa Díaz, que no deja indiferente a nadie. Se ha pintado en blanco, a juego con la casa encalada.

¿Sabías que también puedes cubrir chaise longues o puffs con fundas de lino? Mira qué bien le sienta a este sofá su funda de lino blanca. Se ha acompañado con unos cojines de colores vibrantes para dinamizarlo. Las fundas de lino encogen en su primer lavado en lavadora. Lávalas en frío, máximo 40º, en ciclo corto o en seco. ¡Y así prolongarás su vida útil!

Unas ventanas con cristales sucios tienen la capacidad de afear toda la estancia y, además, hacer que se vea mucho más pequeña de lo que es. Limpia bien los cristales y el interior parecerá no tener fin. Ganarás espacio, ganarás luz. 

Especialmente en salones pequeños, los espejos harán que el espacio parezca más amplio, y de paso reflejarán la luz. Son elementos clave de la decoración que necesitáis integrar sí o sí en vuestro hogar. ¡Resultados asegurados!

Apunta esta otra idea de cómo combinar un sofá verde en salones clásicos: este modelo de terciopelo en verde esmeralda ha sido elegido por las interioristas Ana Pardo y Carla Rotaeche. Fíjate en el color de los cojines: del beis, al verde claro, pasando por tonos rosados empolvados o lilas que le vienen como anillo al dedo. La alfombra en un beis y verde súper discreto deja que el sofá se luzca a placer.