Una cama elevada, algo más alta que las standard, con cajones debajo es una solución perfecta para guardar tanto como en una cama arcón. Asegúrate de que los cajones tienen ruedas. Los sacarás sin esfuerzo y podrás acceder a todo lo que guardas con mayor comodidad. Su punto débil es que son piezas muy pesadas, difíciles de mover y también de acceso complicado a la parte inferior. Pero compensa TODO el espacio que te regalan. Cama Brimmes, de Ikea. El cabecero y el baúl Stuva, son también de Ikea, y la lámpara, de Cado.