Tendencias en decoración de verano 2021

Las alfombras redondas, sobre todo de fibras naturales, seguirán triunfando durante la temporada estival, ya sea dentro o fuera de casa. Anímate con una de estas alfombras en el salón, o atrévete a llevarla a la zona del porche. Aportan mucha frescura y combinan prácticamente con todos los estilos. 

Como habrás comprobado, las fibras naturales se coronan como una tendencia eterna de la decoración de verano, y eso también afecta a los estores. Al escogerlos en yute adaptarás tu hogar a la época estival instantáneamente, aunque si quieres reforzar la protección contra los rayos del sol, siempre puedes acompañarlos de unas cortinas opacas.

Los muebles de rejilla o cannage no dejan de arrasar. Se trata de una tendencia que goza de cierto espíritu vintage y que concibe ambientes muy frescos. Y es que el mimbre esterillado ya es protagonista de cabeceros, puertas de armarios y hasta pufs como el de este salón. ¿Verdad que le da un aire muy desenfadado?

La sostenibilidad y la ecología se han colado de lleno en nuestras vidas, y eso, por supuesto, incluye la decoración de las casas. Este verano apostaremos por materiales reciclados como el plástico que ya da forma a espectaculares alfombras, y a otros 100% naturales como la madera o las fibras que protagonizan butacas, puffs, cestas y lámparas.

Los materiales naturales en paletas sosegadas son el contrapunto perfecto a la decoración de verano más colorida. Nos referimos al estilo Japandi, que gana terreno entre las tendencias más punteras por su frescura y su sencillez.

En el otro bando, es decir, el del colorido, triunfarán los acentos amarillos (ten en cuenta que uno de los colores Pantone del año es el amarillo Illuminating). Para que no resulte muy cantoso, mejor elegirlo en detalles como los cojines.

Los jardines son espacios fetiche durante el verano, y una manera muy ingeniosa de introducirlos en tu hogar es mediante el papel pintado. Los motivos botánicos siempre funcionan, y pueden marcar la diferencia en un dormitorio que antes resultaba aburrido. Fíjate en la pared del cabecero de esta habitación.

¿Qué puede ser más placentero que pasar la tarde en una silla colgante al fresco? Si echas un vistazo a los catálogos de las grandes firmas de decoración, verás que los columpios tanto de interior como de exterior son tendencia. A nosotras nos encantan los de fibras naturales, ¡quedan super fresh!

Otra tendencia clásica que no puede faltar en verano es la decoración de estilo náutico. Pero tranquila, no estamos diciendo que conviertas tu casa en un museo marítimo, sino que apuestes por un mix de tonos blancos y azules con presencia de fibras y madera para reforzar la calidez general. Es clásico y fresco a la par, ¡infalible! Y sí, añadir una figurita de un velero también está permitido.

Uno de los objetivos de la decoración de verano es darle carpetazo al calor, ¿cómo conseguirlo? Aliándote con uno de los tejidos más frescos que existen (y que encima es tendencia): el lino. Ligero y con porte, el lino es perfecto para las cortinas del salón y el dormitorio, ya que permite que entre la luz, pero protege las estancias de los rayos directos del sol, evitando el exceso de calor. ¿Los colores que triunfarán esta temporada? Blancos, crudos, beiges, y en general, tonalidades claras que contribuyen a potenciar la luminosidad y el frescor de los ambientes. También verás azules y verdes.

Cuando se trata de decorar terrazas, porches y jardines, las butacas de mimbre o ratán no pueden faltar. Resistentes al sol y al calor, ofrecen un look superfresco y veraniego. ¿Los complementos que más les van? Los cojines de lino y algodón con estampados florales, a rayas o con texturas.

Así. Literalmente. Este verano las plantas de interior se encargarán de concebir auténticos oasis en los hogares, aportando vida y frescor a todos los rincones. ¿Nuestras favoritas para esta época el año? Monsteras, palmeras, sansevierias, ficus y todas aquellas que con solo verlas te trasladen a algún paraje tropical.

La llegada del verano significa un cambio en toda regla en la ropa de cama. Atrás quedaron las gruesas mantas de lana. Esta temporada, el algodón orgánico y el lino se tiñen de estampados exóticos y florales, tonalidades verdes que nos recuerdan el frescor de la naturaleza, o preciosos terracota que reviven la intensidad de la tierra. También los relajantes azules inspirados en el mar, o los tonos neutros como blancos, beiges y topos que decoran coquetos plaids a los pies de las camas. Como ves, hay opciones para todos los gustos.

Las lámparas de exterior se han vuelto grandes, muy grandes, y es que la tendencia oversize se seguirá imponiendo en porches y terrazas. Elígelas en yute, ratán o cualquier tipo de fibra natural, y si puedes, ¡emparéjalas!

Los jardines verticales llevan triunfando varios meses, y es que se trata de una forma estupenda de agregar naturaleza en cualquier rincón de tu casa sin necesidad de perder metros cuadrados. De hecho, con la llegada del teletrabajo, la creación de espacios verdes en el hogar se convirtió en un fenómeno viral, y este verano prometen acompañarnos tanto en interiores como en exteriores.

Otra de las tendencias que se repiten verano tras verano y que no piensan desaparecer son los estampados exóticos, como esta butaca de estilo clásico tapizada con motivos botánicos que marcan un acertado contraste. Hojas, flores tropicales, e incluso animales como leopardos o tucanes, ¡todo está permitido! La clave reside en decorar con mesura en detalles puntuales para no sobrecargar los ambientes y lograr que destaquen por sí solos.

Un clásico que nunca falla en las terrazas y balcones de verano son las guirnaldas de luces. Las hay en un montón de colores y estilos: con las bombillas al desnudo, de papel, solares, con luces de colores... No dejes de añadirlas en los espacios exteriores, sea cual sea su tamaño, porque la calidez que ganarás cuando llegue el atardecer es incalculable.

Buganvillas, hortensias, rosales, hiedra... La clave para convertir en tendencia una terraza de verano es llenarla de plantas y flores a tope de color. Hay infinidad de variedades tropicales que contribuirán a concebir ese ambiente selvático tan agradecido cuando suben las temperaturas, pero se mantendrán mejor si vives en una zona húmeda. El ave del paraíso, el ciques y la palmera ramificada toleran el sol estupendamente, mientras que la kentia y la areca se mueven en la sombra como peces en el agua. Los rosales son otra opción ideal, ya que florecen todo el año. ¿Con cuál te quedas?

A raíz de la preocupación por llevar una vida más sostenible y en contacto con la naturaleza, los jarrones de cerámica con acabado artesanal se han convertido en una tendencia en alza. Con formas orgánicas o pequeñas imperfecciones fruto del acabado a mano, pintados a color o al natural... No lo dudes: se trata del complemento perfecto para darle frescura a tu decoración de verano.

¿Qué sería del verano sin las hamacas de crochet? Perfectas para descansar entre dos árboles en el jardín, este verano las hamacas se transformarán en el paraíso del boho chic, llenándose de cojines con estampados frescos y alegres.