Los toppers son colchonetas que se sitúan sobre los colchones y pueden estar fabricados con diferentes materiales y acolchados. ¿Sabías que tienen un montón de funciones? Para empezar, sirven para mejorar la calidad del sueño cuando el colchón es demasiado firme o cuando se ha deformado por el paso del tiempo, pero no se desea gastar dinero en uno nuevo.
Además, también protegen el colchón evitando que la humedad, el polvo y los ácaros lo estropeen. En definitiva, los toppers son ideales para alargar la vida de los colchones, son mucho más económicos y mejoran el descanso. ¿No te parecen suficientes motivos para hacerte con uno?