La tienes tan vista que ya ni te das cuenta. Pero sí, hay cosas que afean la decoración de tu casa y hacen que se vea poco cuidada y con un aspecto pasado de moda. ¡Pero hay solución! Y la mayoría no requieren una gran inversión. ¿Lo analizamos? Unas alfombras demasiado pequeñas Unas alfombras demasiado pequeñas darán la sensación de casa mal decorada. Antes de elegir cualquier modelo, mide bien. Asegúrate de que cubre toda la superficie del salón o del dormitorio, dependiendo de dónde la vayas a colocar. Lo ideal es que, en el salón, las patas del sofá queden por encima de la alfombra y que esta también acoja la mesa de centro. Usa las alfombras para separar ambientes en el salón, ya comparta espacio con el comedor o quieras diferenciar una zona de lectura. Unas cortinas demasiado cortas Una estancia sin cortinas da la sensación de que está a medio decorar, pero unas cortinas cortas afearán mucho más la decoración. A nosotras nos gusta que las cortinas arrastren un poco, aportando una caída elegante. Pero si no te gusta esta opción, por lo menos haz que lleguen a ras del suelo. Para ello, cuando las vayas a comprar tienes que medirlas muy bien. Hazlo teniendo en cuenta el tipo de sujeción y hasta dónde quieres que lleguen. Un recibidor hipersaturado Si el recibidor es la primera impresión que ofrece tu casa, es importante que no esté saturado de cosas. Trata de reducirlo a la mínima esencia, con lo más básico. Si necesitas espacio para guardar, mejor hacerlo en un mueble que dejar los abrigos a la vista. Y lo mismo con los zapatos. Coloca un zapatero donde guardar el calzado cuando llegáis a casa. Si el recibidor es pequeño, esta máxima cobra aún más importancia. Si no tienes espacio para un mueble, unas cestas pueden ser el aliado perfecto para dejar el calzado. Todos los cables a la vista No hay cosa que afee más la decoración de tu casa que tener los cables enmarañados y a la vista. Y esto vale para los de la tele, pero también para los cargadores y demás pequeños aparatos que tenemos en el salón (altavoces inteligentes, teléfono fijo, el router...). Dependiendo de dónde estén, tendrás que aplicar una solución u otra. Si la tele está colgada en la pared, tendrás que instalar unas canaletas que los oculten. Para que queden más discretas las puedes pintar del mismo color de la pared. Para el resto de cables, has de saber que hay organizadores de cables muy estilosos y cómodos que harán que tu salón gane en estilo. Un ropa de cama descuidada Una cama mal vestida da una sensación muy fea. Aunque sea un espacio en el que no entráis más que tú y tu pareja, una cama con unas sábanas bien estiradas, unos cojines decorativos y una colcha que le dé personalidad cambiará por completo la imagen de tu habitación. Una iluminación demasiado fría La iluminación es uno de esos factores que pueden hacer que una casa resulte fea, pero, sobre todo, fría. Y es algo que tiene fácil solución. La clave está en elegir no solo umas lámparas decorativas, que aporten estilo y que bañen la estancia de una luz agradable, sino que también es fundamental dar con la temperatura de la luz correcta. Para estancias como el salón o el dormitorio, se recomienda una luz cálida (entre 2.700 y 3.500 K), mientras que para la cocina y el baño, lo mejor es una luz neutra (4.000 K), que imita la luz natural y reproduce los colores con fidelidad. Combina las lámparas de techo con otras de pie, sobremesa y apliques, que proporcionarán información ambiental muy agradable. Unas lámparas pasadas de moda Sí, seguro que no le prestas demasiada atención al techo de tu dormitorio. Y que tampoco le des demasiada importancia al diseño de la lámpara de techo. Pero si está anticuada, por mucho que vistas tu cama como lo hacen en las revistas, el efecto será, cuanto menos, un poco kitsch. Así que mira hacia arriba y, si lo que ves no te gusta, renueva la lámpara de techo. Hay diseños muy estilosos a partir de 50 euros que cambiarán el aspecto total de la estancia. Y esto sirve también para el salón, el comedor, los pasillos... Los muebles de la cocina están envejecidos Es posible que, con el paso del tiempo, esa cocina que te parecía tan estilosa hace años, ahora te resulte vieja y pasada de moda. ¿Una manera de actualizarla? ¡Con pintura! De hecho, puedes hacerlo con pintura chalk paint en un solo fin de semana. Si quieres que el cambio sea total, aprovecha también a renovar los tiradores. Los de concha, como los de esta cocina, son atemporales y quedarán genial en cocinas de estilo clásico o rústico. Las sillas están desgastadas Si tienes unas sillas del comedor de madera, pero cuentan con rayones y el barnizado está un poco desgastado, ¡hay solución! Tienes varias opciones: puedes pintarlas de un color llamativo, como el azul de estas de la fotografía, o darles una nueva capa de barniz. En cualquier caso, tendrás que lijarlas previamente. Si no tienes tiempo o no te atreves a hacerlo tú mismo, hay talleres de restauración que se encargarán de darles una nueva oportunidad. Hay grietas en las paredes Es normal que, tras una temporada después de haber estrenado el piso, hayan salido unas grietas en las paredes propias de las contracciones de los materiales cuando cambian las temperaturas. Y lo peor es que, pintes las veces que pintes, no desaparecen. ¿La solución? Instala un moderno papel pintado que, además, te ayude a conferir a la estancia de un aspecto más moderno. Este, con acabado textil, es muy cálido y agradable a la vista. La colcha de la cama está un poco desgastada Añade un plaid a los pies y unos cojines en el cabecero (suelen ser las zonas que más se desgastan con el uso) para que la cubran un poco y desvíen la atención. Y si ya los tenías, ¿por qué no los renuevas tú misma? Hazles una funda a los cojines y cose una tela a juego a una de las caras del plaid. Tienes outlets durante todo el año con telas supereconómicas. Una pared con mucho roce Fórrala con un zócalo. Quedará como nueva y además mucho más protegida. Los tienes de PVC muy fáciles de instalar (solo con adhesivo) y que además se limpian fácilmente con agua y jabón. Una encimera o una mesa estropeada Puedes renovarla sustituyéndola por una nueva. En los grandes centros de bricolaje te las cortan a medida. O también pintándola; ahora hay pinturas multisuperficie que no necesitan imprimación. La tapicería del sofá ha perdido lustre Ponle una funda. Si la compras ya confeccionada, no te saldrá tan cara como crees. Las tienes tipo plaid, pero también elásticas y ajustables que se adaptan a la forma del sofá y parecen realmente hechas a medida; incluso las hay para chaise longue. Y se pueden lavar en casa. El suelo está rayado Coloca una alfombra que lo tape. Si tu casa tiene trote (niños, mascotas...), ponla de algodón 100% sin base rígida, ¡podrás meterla en la lavadora! Una estantería rebosante de cosas pequeñas Añade unas cestas donde puedas tenerlas recogidas y ocultas: ganarás una agradable sensación de orden. Si las pones de fibras, además aportarán al conjunto un toque natural muy cálido. Otra opción también muy práctica consiste en cerrar los huecos con puertas; una solución con la que además mantendrás la estantería libre de polvo y que es adecuada sobre todo para la zona más cercana al suelo. Los azulejos cercanos a la placa han perdido brillo, color… Forra toda la zona con unas baldosas Porcelánicas autoadhesivas. No hace falta retirar los azulejos que tengas, se pegan sobre ellos. Y hay incluso mallas de gresite. Un mueble con aspecto pasado o algo envejecido Hazle una puesta a punto: repasa cajones, patas… y dale una imagen más actual cambiando los herrajes y pintándolo. Con las nuevas pinturas a la tiza es muy fácil, no necesitan imprimación. El alicatado del baño tiene manchas de moho Coloca un papel vinílico encima. Hazlo al menos en las zonas menos expuestas al agua; el resto puedes forrarlas con el mismo material que te proponíamos para la cocina. Eso sí, antes tendrás que dar una masilla especial para eliminar las juntas de los azulejos y crear una base donde el papel se adhiera bien. Si buscas rollos de papel sobrantes, el cambio te saldrá a muy buen precio. Los marcos de las puertas tienen marcas Si están ‘machacados’ por los golpetazos, los continuos portazos... cámbialos. Compra las jambas sueltas y córtalas a la medida. Cojines descabalados y descolocados Cambia las fundas conservando el relleno para que te resulte más económico. Busca en los outlets: las lisas resultan más económicas que las estampadas. Y ten bien colocados los cojines, si no afean el sofá y dan sensación de descuido. Y si eres mañosa, puedes hacer tú las fundas de los cojines . Mesas muy recargadas Despéjalas. Retira todo lo que no sea imprescindible y deja solo algunos elementos decorativos. Quedan muy bien las parejas: dos velas, dos cajas... Radiadores que amarillean Si se trata de un radiador, puedes ocultarlo con un cubrerradiador o pintarlo. Para hacer esto último, aplica primero un sellador universal y luego un esmalte especial: resistente al calor y sin olor. La pintura de las puertas ha amarilleado También puedes pintar las puertas lacadas. Líjalas y usa un esmalte de poliuretano, resistentes a roces y manchas y que se puede lavar. Si además cambias los tiradores, parecerán otras. 15 ideas para ganar metros y luz Si necesitas más luz espacio en tu casa, estas ideas son perfectas. Aplícalas y gana amplitud. ¡Dale al play! Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en www.elmueble.com, suscríbete a nuestra newsletter .