Los niños crecen y tarde o temprano toca adaptar las habitaciones infantiles a los gustos (a veces, muy especiales) de los más pequeños. Pero que no cunda el pánico: por mucho que necesite un cambio, no siempre hay por qué renovarlo todo. Además de textiles y papeles pintados, hay una pieza de mobiliario que marcará el estilo de la decoración. ¿Cuál es? El cabecero. De madera, tapizado, de fibra, capitoné… Es probable que solo tengas que cambiar este elemento para que su cuarto parezca otro. Así que, echa un vistazo a esta selección de cabeceros infantiles porque es posible que se convierta en una nueva adquisición.