La originalidad de esta ensalada César radica en sustituir la lechuga romana por brotes de espinaca tiernos. Llena de vitaminas, hierro y proteinas, es una cena ligera y muy fácil de hacer.
- Comensales: 4
- Tiempo: 5 minutos + maceración
Ingredientes
- 125 g de pechuga de pollo
- 400 g de espinacas tiernas
- 75 g de queso parmesano
- 1 huevo
- 1 diente e ajo
- 3 cucharadas de zumo de limón
- 3 cucharadas de vinagre
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta negra
Preparación
Paso 1: Pela el ajo y déjalo macerar en 100 ml de aceite durante 3 ó 4 horas. Cuece el huevo en agua salada unos 12 minutos. Refréscalo en agua fría y pélalo. Retira el ajo del aceite y añade el huevo troceado, el vinagre, el zumo de limón y 1 pizca de pimienta. Tritura todo hasta conseguir una salsa homogénea.
Paso 2: Salpimienta la pechuga de pollo y ásala a la plancha, con unas gotas de aceite, hasta que esté dorada por ambos lados. Luego, córtala en tiras finas. Lava las espinacas, límpialas, escúrrelas y trocéalas. Mezcla ambas y ponlas en una ensaladera. Añade el queso cortado en lascas finas, aliña con la salsa preparada y sirve.
EL TRUCO: Por la mañana, deja el ajo que macere, así cuando llegues a casa podrás prepararte la ensalada en un periquete.