Quien avisa no es traidor, y Judith y Gustavo siempre lo advierten: su casa tiene algo que engancha. No solo la disfrutan ellos, sino también sus inquilinos. Y por eso cuidan hasta el último detalle para que estén como en casa. ¡O mejor! Así, normal que, quien la vive, esté desando volver cuanto antes. ¿Te arriesgas a caer en sus redes?
Si te has quedado con ganas de ver más no te pierdas esta galería de imágenes en la que podrás ver hasta el último rincón de esta casa que levanta pasiones.