“En el dintel de la puerta pone 1726, aunque tengo entendido que en realidad data de 1681 y que aquí vivió un cura de la zona... el hombre se procuró un buen descanso”, nos cuenta Pepe, el propietario de esta casa. ¡Y que lo diga! Son casi 500 metros cuadrados de casa y 100 de jardín y, al parecer, siempre ha mantenido ese halo de espectacularidad y esencia que puede sentirse hoy al visitarla.
Hace algo más de cuatro años que Pepe compró esta casa ¡y ya tiene decenas de historias que contar! Probablemente porque es sumamente especial y singular. Tiene el tamaño y estilo de una antigua masía medieval típica catalana, de las que se encontraban apartadas y solitarias en las montañas. Pero esta, sin embargo, reluce ubicada y perfectamente integrada en el centro de Torrent, posiblemente el pueblo más cotizado del Bajo Ampurdán (qué maravilla).
"En estas casas hay que mantener la esencia. El secreto es rehabilitarla utilizando técnicas y comodidades actuales pero que no desentonen y que tengan sentido", cuentan los decoradores.
Atentos, aquí viene su segunda historia: “Encontramos dos registros en el techo. Uno es de un pintor que dejó ahí su huella y el otro es un manuscrito hecho a pluma en 1916 que explica lo mucho que impresionaba la casa ya en aquella época”. Lo mismo debió de transmitirle a él cuando se la compró a una señora que la había tenido durante 40 años y decidió reformarla, ampliarla y restaurarla hasta conseguir lo que es hoy: “Por entonces eran cuatro habitaciones y tres baños, hoy son seis dormitorios y 5 baños”.
Contó para ello con la ayuda de Grup Escrivá Interiors, que se encargó de la reforma pero conservó algunos elementos y piezas en su estado original. Y es que son ellos los narradores de historias, los que mantienen la esencia y el alma de un lugar tan especial y los que hacen que el trabajo de reforma y decoración tenga sentido.
Juan Carlos Escrivá, de Grup Escrivá, lo sabe bien: “Todo tiene que ser coherente con el espíritu de la casa, como, por ejemplo, el cemento pulido que utilizamos y que antiguamente también se usaba. Todo tiene que ser coherente con el espíritu de la casa”.
Y acabamos con la tercera historia de Pepe, que en realidad, son muchas historias en una. ¿Cómo puede ser eso? “Porque tenemos una gran biblioteca llena de novelas. Leer en este porche es un auténtico placer”. Nos lo podemos imaginar...