Sean los primeros, segundos, terceros y hasta los cuartos... los bebés que esperan estos famosos tienen dos cosas en común: que serán muy deseados y que tendrán una habitación donde sentirse protegidos.
Y es que al final una habitación de bebé debe ser segura y acogedora para los peques y cómoda para los padres. No necesita muchos elementos: una cuna, una zona de cambiador, una butaca y poco más. Lo ideal es que tenga mucha luz natural y esté decorada en tonos claros y calmados. Con los años ya habrá tiempo de ir adaptándola.