El otro día leí un artículo muy interesante sobre la división entre personas matutinas y vespertinas. Ellos les llamaban alondras y búhos y me hizo gracia. Resulta que está estudiado que existen dos tipologías de personas en función de cómo reparten sus energías a lo largo del día. Las personas matutinas (grupo en el que me incluyo) tardan menos en despertarse y están más activos las primeras horas del día. Mientras que las vespertinas tienen un despertar más lento y sus capacidades cognitivas aumentan con el paso de las horas.

¿Y eso tiene que ver con el orden? Pues más de lo que puede parecer. Pongamos como ejemplo a Marie Kondo, la gurú del orden por excelencia y creadora de su método KonMari. La japonesa es claramente una persona matutina que madruga y empieza el día a tope de energía. En su libro La magia del orden, Marie Kondo recomienda ordenar a primera hora del día que es cuando, según ella, "la mente está más despejada de toda la jornada". También recomienda elegir un espacio tranquilo y hacerlo a solas para que nadie influya en tus decisiones de tirar (por supuesto).  

Otro imprescindible de la gente ordenada es dejar la cama hecha por las mañanas. Según explica William McRaven, almirante de los Navy SEALS, en un discurso que ya tiene más de 6 millones de reproducciones en Youtube: "Hacer la cama cada mañana supone completar con éxito la primera tarea del día. Ese gesto tan sencillo te dará una pequeña razón para sentirte orgulloso y afrontar la siguiente tarea y la siguiente... Y, al final del día, se habrá convertido en muchas tareas completadas". Nosotras te ayudamos con los siete hábitos de la gente ordenada, además de hacer la cama. 

Pero no sufras si eres una persona vespertina. La noche es un gran momento para poner en orden ciertas cosas de tu casa y, de paso, allanar el camino hacia un sueño reparador. Así antes de irte a dormir puedes colocar los cojines del sofá, recoger tu zona de trabajo o dejar tu cocina impoluta. Aquí tienes el resto de 11 cosas que ordenar antes de irte a la cama.  

Cuéntanos: ¿Eres de mañana o de noche?