Coronavirus

El síndrome de la cabaña: "no quiero salir de casa"

¿Te pasa que te da miedo volver al mundo exterior? ¿El peligro de contagio te paraliza? Es algo que le ocurre a quienes han pasado mucho tiempo en hospitales o personas que han sido secuestradas y se llama "síndrome de la cabaña". Lee cómo debes combatirlo

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Según cuenta la BBC en un interesantísimo artículo, empezó a hablarse del "síndrome de la cabaña" a comienzos del siglo XX en Estados Unidos. El término describe un estado mental causado por meses de aislamiento, soledad y aburrimiento, debidos a los largos y extrenos inviernos que vivían los habitantes de algunas zonas como Minnesota o incluso Canadá. Hablaban de "locura de la pradera" o "locura de la montaña". Los astronautas y quienes han estado aislados, en hospitales, en cárceles, o quienes han sido secuestrados, también pueden llegar a ese estado.

Llevado al momento que nos está tocando vivir con la pandemia del coronavirus, ¿puede afectarnos? ¿Sientes tú también miedo a volver a salir? ¿Te pasa que las noticias de la desescalada no te alegran como debieras?

Según explican los psicólogos, cuando estás recluido en un sitio pequeño y tienes poca movilidad, tu energía baja. Te acostumbras a vivir así y en esta situación, que pasa a parecer la normal. En nuestro caso, con el confinamiento, nuestra casa se vive como el lugar más seguro y el mundo exterior es el sitio donde se encuentra el peligro. Entonces, llega el miedo.

¿Debemos tener miedo a salir de casa?

"El miedo surge cuando pasan cosas diferentes a las habituales e incertidumbre, y ahora abundan ambas. Con lo cual para combatir el miedo es buena la información fiable y precisa. Si respetamos las medidas aconsejadas oficialmente, podemos hacer salidas y disfrutar de ellas. ¿Es bueno salir de casa? Sí. Estamos en una realidad diferente a la que es sano acostumbrarse. No hay que salir todos los días, ni el primer día permitido, pero sí proponerse salir y hacer deporte o caminar. Porque nuestro cuerpo, biológica y psicológicamente, nos lo va a agradecer", nos explica la psicóloga Noelia Sancho.

¿Cómo podemos calmar el miedo o la ansiedad?

La psicóloga nos da varias ideas:

  • Podemos salir con un propósito, por ejemplo hacer un recado, ir a la compra, hacer ejercicio, un recorrido algo pensado, una hora concreta... con aquello que cada uno se sienta más cómodo. Esto en principio ayuda más que salir a dar una vuelta.
  • Por otro lado, plantear la salida como algo más del día, no como el “evento” del día, le quita la sensación de miedo.
  • Además "siempre recomendaré en toda esta situación extraña practicar mucha relajación y deporte, que ayudan con la ansiedad. Una rutina diaria, sencilla de 30 min ayudará a que el cuerpo se desentumezca, se estire y el cerebro genere una dosis de dopamina y endorfinas. Internet es una mina de oro de videos de ejercicios… ¡hay que aprovechar! Y por otro lado, practicar una relajación diaria (de 10 min mínimo) ayudará a las neuronas a frenar, a conectar con el ritmo corporal y a mantener un buen equilibrio de serotonina en nuestro cerebro", explica Noelia.
  • Para muchos, la meditación es una buena práctica.
  • En casa, es importante parar. Mirar, escuchar los pájaros, fijarte en el árbol que florece delante, o en qué color tiene las cortinas el vecino. Practica el “aquí y ahora”. Observar, escuchar y sentir durante al menos 10-15 min al día, es un práctico ejercicio de mindfulness que siempre te beneficiará.
  • Desahógate. "Sola o con alguien, es bueno permitirte en un momento dado un episodio de llanto o de miedo, de desesperación o de rabia… Dilo en alto incluso aunque estés sola. Y después tomarte unos minutos para respirar. Acumular emociones suele acabar en malestar, y esta es una situación lógica para sentir una montaña rusa en el interior", explica Noelia.
  • ¡No olvides el humor! "Ayuda a sobrellevar los malos momentos. Elige el humor siempre que puedas para comunicarte con tus amigos, para elegir una película o esa serie. Los estudios sobre astronautas en el espacio lo demuestran", explica Noelia Sancho.

¿Quiénes pueden sufrir más esta situación?

"En primer lugar, las personas de riesgo, que lógicamente llevan peor la posible exposición. Después el miedo a la salida se dará más en personas con tendencia a la ansiedad y a la aprehensión, y personas menos flexibles. Pero es cierto que ante la anormalidad de la situación, cualquiera podemos estar expuestos a ello", comenta Sancho. Sobre todo, hay que tener cuidado con las personas mayores, los hipocondriacos, o quienes viven solos, que podrían ser quienes más miedo o ansiedad sientan.

Seguro que pensar en cosas bonitas y divertidas que puedes hacer te ayuda. O dar las gracias por todo lo bueno que tenemos. O llamar a esa amiga que te calma y te dice que todo irá bien.