Todo lo que tiene que ver con la salud y el bienestar, el sentirnos bien y más felices, ¡nos interesa! Y si además se trata de estar más a gusto en casa, también. No se pierde nada por intentar seguir hábitos que nos pueden hacer mejorar. Son nuevas tendencias que nos hacen sentir bien pero que todas tienen como base algo que precisamente no es nuevo: valorar lo sencillo, lo realmente importante. La casa tiene que ser tuya y de tu familia. Ser ese templo en el que te sientes bien, protegido, a salvo.
“Busca tu plenitud y autenticidad pensando en ti, no tanto en causar buena impresión a las visitas” Isabel Zúñiga

¿Qué hacer para que la casa sea más “tú”?
- “Más allá de dimensiones o estilos decorativos, las dos premisas principales a tener en cuenta serían hacer tuyo ese espacio (incluso sin serlo técnicamente, como en las casas de alquiler) y sacarle el máximo partido desde ya, sin esperar a ese momento perfecto que quizá no llegue nunca” explica la redactora, especilista en bienestar y autora del blog A gusto en casa.
- Tómate tu tiempo, pasea tranquilamente por tu casa y ve anotando lo que te gusta, lo que puede mejorarse y lo que tiene que desaparecer.
- Modificar la distribución de los muebles, renovar los textiles, pintar o empapelar son opciones muy efectivas al alcance de todos con las que podrás darle un nuevo aire a tu casa.
- Una casa auténtica transmite la historia y la personalidad de sus habitantes. Decorar con fotografías propias, cuidar esos detalles que dicen mucho de ti, mostrar tus colecciones o esa afición que te identifica, exponer objetos relevantes de la historia familiar, apostar por objetos hechos a mano…
- Con esto recuperarás momentos y lograrás que lo que te rodea te haga sentir bien.
- Todos los miembros de la familia tienen que disfrutar de la misma sensación. La armonía y el consenso son vitales para la buena convivencia. La casa está para desconectar (todos).

Además del hygge danés, otras corrientes de bienestar en casa similares son el lagom sueco -que apuesta por el equilibrio y la moderación a fin de centrarnos en lo realmente importante y ser más felices- y el nesting –algo así como “anidar” en casa, quedarnos a disfrutar de ella sin salir para compensar el estrés de la semana-. Son buenas tendencias o corrientes a través de las que acercarse a valorar el placer de una vida sencilla que valora lo realmente importante. Encontrarás interesantes lecturas relacionadas con estas corrientes, que te ayudarán a dar forma a las ideas para sentirte más a gusto en casa.