En casas pequeñas, abrir la cocina a la zona de día es una de las reformas estrella. Pero, no siempre es la mejor solución, porque "pierdes" una pared que te puede ser de utilidad como apoyo de mobiliario. En estos casos, un murete puede ser una gran solución, como en este salón reformado por Mireia Masdeu. El murete sirve de apoyo al mueble del estar, por un lado, y los muebles de la cocina, por el otro. Y, además, deja pasar la luz entre ambos espacios y los comunica, dando más amplitud visual. No te pierdas el antes y después de este piso y sus fantásticas ideas.