Zona de trabajo

Si estás pensando en ampliar tu dormitorio integrándole una pequeña terraza que no utilizas, esta idea te interesa: reserva el espacio ganado para montar una zona de trabajo y marca la transición entre estos dos ambientes con un arco alargado que dé un toque distintivo y encantador a la estancia.

¿Por qué no reservar el espacio que queda bajo la ventana para crear un rincón de trabajo en el dormitorio? Es fundamental que el escritorio que elijas se ajuste al espacio disponible y mejor si integra una cajonera que te ayude a mantener el espacio ordenado. Acompáñalo de una silla que pueda deslizarse fácilmente debajo de la mesa cuando no esté en uso. 

Puede ser una idea original y funcional si se ejecuta de manera adecuada. Debes tener en cuenta el espacio disponible, cómo vas a organizar tus cosas para evitar que el desorden se apodere de este rincón y cuidar que los muebles se integren armoniosamente en el ambiente. Un reto que en esta casa se ha conseguido.

Y si son del mismo color que paredes y techo, mejor que mejor. Esa sensación de continuidad visual contribuirá a una percepción de mayor altura. 

El ruido visual puede ser tu gran enemigo en un piso pequeño. Y es que demasiadas cosas, muchos adornos y las paredes muy abarrotadas pueden provocar una sensación agobiante. Por eso es importante que mantengas un control en cuanto a los objetos decorativos que tiene tu casa. Evita colocar demasiadas cosas y, en la medida de lo posible, mantén una línea cromática determinada que no provoque un batiburrillo de colores poco estético. 

Un pasillo ancho tiene muchas posibilidades. Puedes colocar un cómodo banco que sirva como mueble auxiliar o una consola con poco fondo. ¿Más opciones? Un escritorio estrecho que sume a tu casa una zona de trabajo extra.  

Con estructura de respaldo y brazos en madera de roble y cuerpo en blanco con ruedas. Esta silla giratoria de IKEA, modelo Fjällberget, suma elegancia y estilo en cualquier zona de trabajo. Es un diseño muy nórdico que tienes que tener entre tus básicos para decorar espacios de estudio.

Nada de efecto marcado o llamativo. Hay papeles pintados de todos los estilos, pero muchos discretos, que solo suman. "El papel pintado te ayuda a marcar alguna zona que se quiere que tenga un mayor protagonismo en la estancia o decorar de una manera muy sencilla un espacio que da la sensación de vacío", aporta Estela López de Deco & Living.

Es un lugar perfecto para ganar esa zona de trabajo que necesitas. Perfecto si el pasillo cuenta con una ventana por la que entre la luz natural. ¡Eso será todo un lujo! Con una mesa de fondo 50 cm es suficiente para crear tu escritorio. Recurre a mesas exentas o a un mueble a medida. Rápido es una encimera fijada a la pared en varios puntos sujeta sobre listones o escuadras. Así quedará despejada la zona de debajo para incorporar la o las sillas y una cajonera.

En zonas de mucho tránsito como recibidores, cocinas o zonas de trabajo, conviene poner un suelo de madera laminado o porcelánico cuyo mantenimiento es mucho más cómodo y, además, no cambia de color con la luz solar.

¿Quieres un truco? Si colocas las tablas de madera en horizontal, parecerá que el espacio se ensancha; mientras que si lo haces en vertical, parecerá más largo. En este despacho las lamas se dispusieron a lo ancho, en formato XL y color claro. ¿Te has fijado lo bien que queda el pavimento beige con la librería lacada en blanco?

El estilo rústico de los algodones y los linos gruesos van a ser otra de las tendencias fuertes de este verano, nos desvela Natalia Zubizarreta. "Los tejidos estarán muy presentes en cortinas que harán las veces de separación de espacios, en lugar de tabiques". La organizadora profesional Genoveva Núñez decidió decorar con cortinas de lino su casa de verano para dar más frescura a las estancias. 

En la zona de dormitorios, los propietarios querían una habitación de invitados que también fuera despacho. "La solución fue poner el escritorio en la parte más luminosa, aprovechando esta esquina con unas baldas. El armario es totalmente a medida, sin mucho fondo. Así pudimos incluir librería y una cama abatible. De esta manera, en el día a día la sensación de amplitud es impresionante", indica. 

Mira qué idea tan buena para integrar el rincón de trabajo en el salón: apoyar un espejo de cuerpo entero en la pared de manera que refleje la decoración de la sala. ¡Apúntatelo!

Los más habituales y fáciles de poner son los zócalos superpuestos. Puedes encontrarlos uniformes, más fáciles de limpiar porque no acumulan polvo, o escalonados, como el de este dormitorio juvenil tan moderno y "El Mueble", diseñado por Asun Antó. El modelo High Line, de Orac Decor® representa muy bien a este último.

Además de los superpuestos, también hay zócalos integrados, como prolongación de la pared, y rehundidos, perfectos para ocultar iluminación led. 

Las zonas de trabajo en dormitorios suelen ser delicadas porque, al sentarnos, se producen roces en la pared con los pies de manera inconsciente. Para solventarlo, un zócalo decorativo será la solución y la clave para ocultar los cables.

En este dormitorio, como lo que destaca es el papel pintado, el Estudio Hoc Volo ha optado por un modelo blanco y liso, que cumple su función sin competir con la pared.

¿Te gustaría tener una zona de trabajo en el salón pero no tienes suficiente espacio? Marta Tobella te brinda la solución: una estantería de hierro pintada de blanco que decora e integra el escritorio. El estante, que hace las veces de mesa, se disimula con tan solo despejarlo y quitar la silla.

En 2024, los dormitorios combinarán líneas rectas con curvas. No solo en asientos o textiles, también en soluciones estructurales. Los arcos van a estar al orden del día, como en este proyecto firmado por Solange Van Dorssen, bajo el que se ha ubicado la zona de trabajo y de lectura.

A los dormitorios de invitados también hay que prestarles la debida atención. ¡Nunca se sabe cuando los amigos nos van a hacer una visita sorpresa en 2024! Y para que estén realmente cómodos, incorpora un tablero en la pared que les sirva de escritorio o de tocador, si le añades un espejo. Es lo que hizo en este de la imagen el Estudio Villarroel Torrico. ¡Mira qué elegante queda en blanco y negro!

El cabecero en blanco roto y el papel pintado gris de acabado textil podrían ser suficientes reclamos para dar personalidad a este dormitorio de invitados. El Estudio Villarroel Torrico fue un poquito más allá creando detrás de un medio tabique una zona de trabajo que también sirve de coqueto tocador, gracias a su original espejo.

La parte superior de la pared ofrece muchas posibilidades para guardar en módulos suspendidos. Y si se hace un diseño tipo puente como aquí, integrando una encimera, no solo sumas almacén, sino que ganas una zona de trabajo. Tiene un aire juvenil y actual al combinar los frentes de madera de pino y la balda y la pared azul. 

Similar, módulos de 60 x 230 con 3 puertas, 2 módulos de 80 cm con puertas elevables y mesa 1.560 € +IVA en vadilloytojo.com. 

Jeanette Treshing ha convertido un entrante en la pared en una zona de paso en una zona de baldas con una mesa volada de estudio para dos. Además, integra las instalaciones y tiene los libros de consulta a mano en las estanterías que ocupan toda la pared. 

En este estudio la mesa de cristal se funde con los colores del jardín que entran desde el ventanal. El cristal multiplica el efecto luminoso y queda muy ligero. La silla de madera de olmo y con asiento elaborado en cuerda de papel natural es envolvente y cómoda. La alfombra de fibras y la lámpara de loza le dan el toque final. 

Un mueble a medida recorre el estudio de pared a pared e integra armarios altos, espacio para la TV y una balda volada que hace las veces de mesa de estudio. Tiene un aire juvenil y actual al combinar los frentes de madera de pino y la balda y la pared azul. Es un diseño de Egue y Seta. 

En esta ocasión, una gran mesa de madera preside esta zona de estudio junto al ventanal, el cual es la primera fuente de luz natural. La mesa es un diseño de Tessa Interiorismo de madera recuperada. Este, encaja con los ventalanes pintados en gris. La silla de oficio, también de madera, es una silla antigua con ruedas y altura regulable que da un toque vintage. 

El detalle final, la alfombra de fibra y las plantas dan frescor y un aire acogedor.

PRECIO: Mesa de Tessa Interiorismo (900 €) y silla antigua, similar en Mercantic. Alfombra de Papiol. 

Infalibles

¡El salón perfecto existe! Este de Coton et Bois tiene todas las claves y te las mostramos con vídeo

De aire atemporal, pero con toques modernos, así es esta zona de estudio que tiene su gran escritorio de diseño como gran protagonista. Se trata del modelo Elle Crit de Riva 1920. El escritorio combina madera maciza con cuero negro, un color también presente en la librería que enmarca el despacho. La librería, de dos cuerpos y huecos simétricos, aprovecha el hueco junto a la ventana. 

La butaca tapizada en terciopelo gris y con tachuelas completa el estudio. Cómoda y con estilo, enfatiza el look moderno y chic. 

PRECIO: Mesa Elle Crist de Estudio Riva 1920 (2.000 €). La butaca es de Luzio (400 €) y la librería de Corium. 

El despacho de este piso modernista barcelonés ocupa uno de los mejores lugares de casa: la galería acristalada con vistas y con un suelo hidráulico original. El escritorio robusto de madera y hierro pone la nota de contraste en este espacio bañado por la luz. La silla tapizada en gris completa el conjunto. Por su parte, los estores tamizan la luz en las horas con más sol, dan intimidad y salvan las ventanas redondeadas. Este estudio es una ubicación perfecta para las plantas. 

PRECIO: Proyecto de Deulonder Arquitectura Domèstica, con un escritorio (1.100 €) y sillas de Brucs. Lámpara en Taller de las Indias. 

La interiorista Natalia Zubizarreta ha convertido una zona de paso en un completo estudio entre la ventana y la puerta. Tiene una mesa cómoda y un mueble adherido con sitio para guardar. 

PRECIO: Estudio diseñado por Natalia Zubizarreta (2.058 €). Silla de fibras (278 €) y aplique metálico (172 €).

Este escritorio se ha realizado a medida para adaptarlo al ancho del sofá en el que se apoya (mira cómo distribuir el salón cuando sofá no apoya en la pared). Mide 20 cm de ancho x 40 de fondo, un espacio suficiente para que dos personas puedan trabajar o estudiar a la vez.  La mesa es de roble y casi se funde con el suelo de madera. Su diseño es muy ligera, tiene una estructura en U y dos cajones integrados casi invisibles. 

Para esta ocasión, la silla es muy cómoda inspirada en la Plastic Chair de Vitra, recoge bien la espalda y está acabada en cuero, es cálida y moderna. 

PRECIO: Escritorio de madera de roble diseñado por Laura Ehlis (786 €). Silla de cuero, similar en Kave Home (119 €). Lámpara flexo de Catalina House.

El siguiente escritorio está diseñado por la interiorista Marta Tobella que ha creado una zona de estudio y para hacer manualidades en un rincón de la buhardilla. Ha sacado partido a la zona del techo más bajo con una librería lacada a medida. La mesa de madera, también a medida, es de pino macizo y pone el punto de calidez en contraste con techos, paredes y mueble lacado en blanco. 

Predominan los detalles de fibras como las lámparas de techo o la cómoda silla de ratán que se apuntan a la calidez de la mesa y dan también un aire más relajado y natural. 

PRECIO: La mesa de pino es un diseño de Marta Tobella (1.200 €), igual que la librería (2.500 €). Silla (300 €) y lámparas de fibras procedentes de Sacum. 

Los interioristas de Space Stage han creado una zona de trabajo en lo que era un pasillo. Con vistas a la montaña y envuelta de madera, la mesa alta va de pared a pared y tiene unos armarios ocultos debajo. Para sentarse han optado por escoger unas sillas altas parecidas a las típicas de bar. 

Esta idea para aprovechar al máximo un piso pequeño nos la regaló la interiorista Mercedes Pérez en el número de abril. Algo que plasmó en la librería a medida de este salón con alma de despacho. ¿Cómo? Dejando la última balda, a modo de escritorio, y colocando una silla de quita y pon.

Por si fuera poco Mercedes nos dejó otras perlas: "También puedes instalar una zona de trabajo detrás del sofá, pintar la librería del mismo color que las paredes para camuflarla y jugar con huecos simétricos para conseguir equilibrio".

Las zonas de estudio y de trabajo hay que decorarlas a nuestro gusto para que nos hagan sentir bien.

Coloca un pequeño arbolito (limonero, olivo) sobre un cesto en el suelo o una planta de interior pequeña, como el helecho, sobre la mesa de escritorio. Es lo que nos sugiere la interiorista Natalia Zubizarreta en este proyecto.

"Para toda la casa me he basado en los tonos azules y verdes, que me llevan al campo, y ahora he empezado a incorporar el rojo cereza para darle alegría. Cada vez que compro muebles, los busco claritos para que la casa tenga más frescura", dice Natalia.

Este mueble es la pieza destacada del despacho de los arquitectos Ana Blanco y Fran Mengíbar. Combina una zona de baldas con un cajones y grandes huecos perfectos para tener en orden documentos, muestras y catálogos de trabajo... La hilera de cajones es un gran aliado para guardar lo más pequeño y contribuir al orden. 

La Navidad es tiempo de manualidades. Deja que tus hijos decoren el árbol de Navidad y lo llenen de adornos repletos de buenos deseos: casitas, figuras de renos, estrellas, coronas, bolas con nieve... Cada uno de ellos será un símbolo handmade que llenará de buena suerte vuestra casa.

Para aprovechar al máximo el espacio, Olga y Mar destinaron una zona del salón a despacho versátil, porque cuenta con un sofá cama idéntico al de la zona de tele, así cuando se necesita el despacho se convierte en habitación de invitados. De ahí el panel corredero, que permite cerrar este espacio para ganar intimidad. Los armarios del despacho siguen el mismo diseño que el mueble de tele, dando sensación de continuidad.  

Las características galerías de los pisos modernistas dan mucho juego. Y el equipo de Deulonder la aprovechó para habilitar un privilegiado espacio de trabajo, con luz a raudales e intimidad, ya que basta con correr las cortinas para "aislarse" del trajín del estar.  

Otro truco para ganar espacio en un piso pequeño sin hacer obras es aprovechar las paredes en su totalidad, de suelo a techo, con muebles para guardar. Ya sean abiertos o con puertas, según la necesidad que tengas. Puedes crear diseños a modo de "puente" que enmarquen un sofá, una cama o una mesa, como aquí.

Otra idea similar para ganar una zona de trabajo o estudio en una zona de paso. Basta un tablero que actúe como mesa. Con 50 cm de fondo es suficiente. En este caso, el tabique que hace de barandilla en uno de los "extremos" del área, es en el que se fija el tablero. Se salva la altura del radiador y se remata con una pata en el lado contrario. Los recovecos de una planta en una casa pequeña se prestan a "encajar" los muebles en ellos.

Otro ejemplo similar que "encaja" un tablero entre paredes y debajo de la escalera. Si no quieres realizar un armario a medida por el presupuesto elevado, puedes colocar algún mueble bajo ya hecho y aprovechar el resto del espacio inclinado con baldas, más económicas. También es un lugar adecuado para crear una zona de trabajo, ubicando la silla en el hueco donde hay mayor altura.

Es fácil que un espejo redondo sea el centro de las miradas, pero un marco en un tono o acabado que contraste con el color de la pared contribuirá a focalizar aún más la atención en esta zona. 

Las paredes de ladrillo visto son el revestimiento por antonomasia de las decoraciones de estilo industrial. Recuerda que también es posible apostar por esta estética sin que quede un look muy exagerado. ¿Cómo? Con un interiorismo actual: muebles de líneas depuradas y detalles en fibra o madera que aporten calidez.